Suspenden una comisión en el Congreso tras la frustrada expulsión de un diputado de Vox por una discusión sobre lenguas
Figaredo se quejó de que el BNG utilizaba el gallego sin traducción, incumpliendo un acuerdo de la Mesa
La Comisión de Industria y Turismo del Congreso, que preside la independentista Inés Granollers (ERC), ha suspendido su sesión este miércoles tras un incidente por el uso de lenguas cooficiales sin traducción, la consiguiente protesta de Vox y la frustrada expulsión del portavoz de los de Santiago Abascal.
El incidente se produjo al debatir una iniciativa del PP sobre el apoyo a la industria electrointensiva. El diputado del BNG, Néstor Rego, ha hecho su intervención en gallego, lo que ha generado la protesta del secretario general de Vox en el Congreso, José Maria Figaredo, al no existir servicios de traducción simultánea en la sala.
La Mesa del Congreso estableció un protocolo el pasado mes de enero, al menos hasta este verano, para que el uso de traducción simultánea se pidiese con días de antelación y que, cuando no hubiera disponible, los diputados que empleen las lenguas cooficiales deben autotraducirse al castellano o bien entregar su intervención traducida con suficiente antelación para que lo conozcan los demás diputados.
Figaredo se ha quejado de que no se estaba cumpliendo el acuerdo de la mesa y la presidenta de la comisión le ha llamado al orden hasta tres veces, lo que conlleva su expulsión. Al ordenar su desalojo, el diputado de Vox se ha negado a abandonar la sala y la presidenta ha suspendido la sesión unos minutos, tras lo cual ha vuelto dar la palabra al diputado del BNG, que ha dado por concluida su intervención sin autotraducirse.
En la sala estaba presente la diputada de Sumar Esther Gil, que es miembro de la Mesa del Congreso, quien ha asegurado que la presidenta de la comisión tenía autoridad para expulsar a un diputado y que la sesión no podía continuar como si nada. «No podemos continuar en estas circunstancias, si no, esto ya se desmonta», ha zanjado.
Así las cosas, la sesión se paró de nuevo unos minutos para que los portavoces se pusieran de acuerdo, pero no hubo forma y la presidenta anunció el fin de la sesión culpando a Vox por «falta de respeto» a la Mesa y la Presidencia de la comisión. «Perdonen las molestias y agradezcan a sus compañeros el respeto a la Mesa y a las instituciones», ha remachado.
Tras la reunión, el dirigente de Vox ha declarado que en la comisión «se sigue vulnerando de forma sistemática el Reglamento del Congreso», ya que en este caso no hubo comunicación previa del uso de lenguas cooficiales ni autotraducción. «No podemos permitirlo y debemos protestar y luchar para que se observen los derechos, en este caso de los diputados, que afectan a todos los españoles», sostiene.