Sordo (CCOO) cree que el Gobierno se someterá mañana «a la prueba del algodón» sobre la reforma laboral
El secretario general de Comisiones Obreras (CCOO), Unai Sordo, cree que el Gobierno se someterá mañana «a la prueba del algodón» cuando exponga sus posiciones en la mesa de diálogo social sobre la derogación de la reforma laboral, tras el acuerdo alcanzado este martes entre PSOE y Unidas Podemos (UP), socios de la coalición.
Sordo se ha referido al comunicado difundido por la Secretaría de Estado de Comunicación sobre los puntos generales de esa reunión entre ambas partes del Ejecutivo con la que se pretendía poner fin a las tensiones de las últimas semanas entre el Ministerio de Trabajo y el de Economía.
«Da fiabilidad a las mesas de diálogo social y se hace corresponsable de su acuerdo de Gobierno, cosa que es bastante obvia. Si es así, responde bastante bien a las materias que, como sindicato, veníamos planteando», ha dicho Sordo en la rueda de prensa para presentar a la nueva Comisión Ejecutiva del sindicato.
No obstante, ha reconocido que la nota del Gobierno tras la reunión de este martes ha sido «bastante críptica» y llena de «lugares comunes», por lo que habrá que esperar al encuentro del miércoles, al que acudirán los ministerios de Seguridad Social, Asuntos Económicos, Hacienda y Educación, para ver si «las propuestas del Gobierno siguen siendo las mismas».
Sordo ha recalcado que su sindicato no está dispuesto a volver a abrir cuestiones ya cerradas en varias ocasiones en la mesa de diálogo social entre el Gobierno, los sindicatos y la patronal.
ESPERANZA DE UN ACUERDO TRIPARTITO
Con este acuerdo dentro del Gobierno, Sordo considera cerrada la «aparente crisis (…) de comunicación o de posiciones» entre los socios de la coalición, y ha aclarado que en estas semanas de desencuentro «nadie del Gobierno ha trasladado una revisión de sus posiciones» en las materias de negociación.
Sordo ha criticado que en estas semanas ha existido una «sobreactuación por parte de mucha gente», también desde la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), que según el secretario general de CCOO ya «daba por descontada que en esta legislatura se iban a revertir» cuestiones de la reforma laboral de 2012.
A pesar de la oposición manifestada por la patronal, el sindicalista no descarta que se pueda alcanzar un acuerdo tripartido, aunque recuerda que se puede seguir adelante sin su visto bueno. «Yo estoy convencido de que la CEOE no se va a descolgar la de negociación (…). Es difícil, pero no es imposible», ha expresado Sordo.
Aunque las posiciones de la patronal parecen las más alejadas de la negociación, Sordo ha precisado que «la posición del Gobierno no es la de los sindicatos» en varias materias, como la restricción del despido.
Los representantes de los trabajadores van «más allá» en este punto, como ha precisado Sordo, que también ha defendido el mecanismo de flexibilidad interna para adaptar las jornadas laborales a los periodos de crisis de las empresas como fórmula para evitar los despidos.
VALIDACIÓN DE BRUSELAS
El secretario general de CCOO ha subrayado en esta rueda de prensa que las líneas de la negociación no van en contra de las directrices de Bruselas, sino que al contrario, cuentan con la validación de las instituciones europeas.
«Yendo al fondo del asunto, lo que se está negociando es compatible con el componente 23 que España ha remitido a la Comisión Europea y que la Comisión Europea ha validado. No es cierto que haya ningún veto de Bruselas», ha expresado.
Bruselas pide a España acabar con la temporalidad, reducir el desempleo juvenil y acabar con la dualidad laboral, como ha citado Sordo, cuestiones «compatibles con las posiciones sindicales.
Además, el compromiso del Gobierno con Bruselas obliga a España a tener lista esta reforma antes de que finalice el año, como condición para recibir los fondos europeos.
SINDICALISTAS DE REFERENCIA
Sordo ha presentado en esta rueda de prensa las conclusiones y la nueva comisión ejecutiva del sindicato, resultante del 12º Congreso Confederal de CCOO celebrado a finales de octubre.
El objetivo de CCOO es convertirse en un «agente determinante en la configuración del nuevo contrato social del siglo XXI que necesita España». Eso pasa por ganar influencia en la definición de las políticas transversales y poner fin a las reformas que se hicieron durante «el periodo de austeridad».
En su nueva etapa al frente de la Secretaría General, Sordo pretende «extender a la organización y mejorar el desarrollo organizativo del sindicato», sobre todo en los sectores menos sindicalizados y en la «España menos vertebrada».
Para ello, su apuesta es reforzar la figura de los «los sindicalistas de referencia» para que las empresas sepan «que hay un sindicalista de CCOO con nombre, apellidos, teléfono y sede al que se pueden dirigir».