México abre un proceso para retirar el nombre de represores a lugares públicos
El Gobierno federal mexicano ha puesto en marcha una iniciativa para retirar de sitios públicos el nombre de responsables de la represión del periodo 1960-1980 bajo el nombre de Plan Verdad y Memoria Histórica del Pasado Reciente.
«No puede ser que tengamos en Puerto Vallarta un aeropuerto (con el nombre de) Gustavo Díaz Ordaz o el de otras personas que cometieron actos criminales contra mexicanos», ha declarado el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, durante la presentación del plan, según recoge el diario mexicano La Jornada .
Este es «el primer paso para esclarecer los hechos de periodos oscuros del país». Encinas se ha referido en particular a la matanza estudiantil de la Plaza de las Tres Culturas de Tlatelolco, perpetrada el 2 de octubre de 1968. «El 2 de octubre no se olvida», no por «nostalgia o amargura», sino por «reivindicación de ideales».
La jefa de Gobierno de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ha destacado la importancia de abrir la memoria histórica de la ciudad y del país con el fin de conocer la verdad de lo acontecido en la segunda mitad del siglo XX y ha subrayado que «la única forma de lograr la reconciliación es abrir la verdad, ofrecer perdón como Estado e iniciar una historia distinta».
«En este simbolismo es cuando nos reconocemos y nos sentimos orgullosos de pertenecer a este gran movimiento que hoy representa la Cuarta Transformación, que no podría ser sin esta posibilidad de desvelar la más negra historia, con el fin de curar heridas y sanar», ha añadido.
Dentro de este plan se revisarán 8.000 cajas con expedientes de la extinta policía política –la Dirección Federal de Seguridad–, la Dirección de Investigaciones Políticas y el Ejército mexicano, y se investigarán casos como los ocurridos en el conocido como Campo Militar Número 1. Además se incluirá en el temario de educación básica y media el respeto a los Derechos Humanos.