El exdirigente de CDC Antoni Fernández Teixidó se reincorpora a la presidencia de Lliures

Tienden la mano al catalanismo moderado y de centro para articular una candidatura conjunta

BARCELONA, 2

El exdirigente de CDC Antoni Fernández Teixidó se ha reincorporado al frente de la presidencia de Lliures, que este jueves ha celebrado su quinta conferencia con una declaración en defensa de la «unidad del catalanismo» moderado en plenas negociaciones para recomponer este espacio.

Así lo han explicado fuentes del partido a Europa Press, con lo que Fernández Teixidó volverá ponerse al frente de la presidencia tras abandonar la formación en abril de 2019 al considerar que el exprimer ministro francés, Manuel Valls, incumplió el compromiso que habían adquirido para presentarse conjuntamente a las elecciones al Ayuntamiento de Barcelona.

Pese a dejar en su momento la presidencia, ha seguido participando en reuniones de la formación y, según las citadas fuentes, le han pedido que vuelva a la presidencia del partido.

Con Fernández Teixidó al frente de nuevo, el comité ejecutivo está integrado por: Ferran Brea; Guillem Espaulella; Montserrat Galí; Víctor Gay Zaragoza; Isabel González; Pere Gotanegra; Javier Hermosín; Nacho Julià; Roger Montañola; Jordi Montanya; Carles Morato; Humbert Palafolls; Àgata Peñalver; Rebeca Reverter; Manuel Romero; Josep Soler e Inma Vivancos.

Con el objetivo de contribuir a resolver el conflicto político catalán, Lliures, que se define catalanista, liberal y humanista, ha tendido la mano a catalanismo moderado y de centro, al que ha pedido «generosidad», para concurrir conjuntamente a las elecciones catalanas.

«TODO EL MUNDO ES IMPRESCINDIBLE»

«Todo el mundo es imprescindible», apuntan en un comunicado posterior, con el objetivo de diseñar una sola candidatura que agrupara a Lliures, Units per Avançar, la Lliga Democràtica, Convergents y el Partit Nacionalista de Catalunya (PNC).

En caso de que no sea posible, el partido de Fernández Teixidó tiene la intención de concurrir a las elecciones «con las fuerzas, entidades y personas» vinculadas al catalanismo y centro que deseen compartir sus objetivos.

Si hubiera candidatura conjunta, su confección debería basarse en el impulso de una comisión coordinadora, con representantes de los actores que la integraran, con funciones de dirección y aprobación del programa electoral, y una comisión asesora.

Sobre el futuro programa electoral, creen que debería incluir una hoja de ruta para gobernar la Generalitat durante una legislatura entera fruto de la negociación y el consenso de todos los presentes en la alianza electoral, y debería promover el despliegue del Estatut de 2006 «en todo lo que no anuló el Tribunal Constitucional», la mejora de la financiación de Catalunya, el autogobierno y la ampliación de competencias.

NO AL REFERÉNDUM

También entienden que no es el momento de celebrar un referéndum de independencia porque, a su juicio, el independentismo no goza de mayoría entre la sociedad catalana y porque creen que ahora es prioritario afrontar las consecuencias económicas y sociales derivadas de la crisis del coronavirus.

Sobre la situación de los presos independentistas, creen que, para contribuir a la normalización de la vida pública catalana y en base a la legalidad vigente, hay que promover «la aplicación de medidas favorables a la situacíon personal» de todos ellos.