El conflicto en Afganistán deja más de 100.000 civiles muertos y heridos en una década
La ONU llama a dar pasos hacia una paz duradera en el país y a una reducción de la violencia
Más de 100.000 civiles han muerto o han resultado heridos en la última década en Afganistán como consecuencia del conflicto, según ha denunciado este jueves el representante especial de la ONU en el país, Tadamichi Yamamoto, en un mensaje en el que ha apelado a la paz.
«La guerra en Afganistán sigue cobrándose un terrible peaje en los civiles», ha lamentado Yamamoto, que ha indicado que recientemente el número de «víctimas civiles» superó los 100.000, después de que la Misión de Asistencia de la ONU en Afganistán (UNAMA) comenzara a documentarlas en 2019.
En este sentido, ha defendido que «la paz es crucial para el futuro de Afganistán» y ha celebrado los esfuerzos en curso para «avanzar y lograr conversaciones directas entre los propios afganos». Pese a los «muchos retos que afrontar en cualquier esfuerzo de paz, la ONU sigue comprometida a apoyar un proceso liderado por los afganos que respete los Derechos Humanos de todos los ciudadanos y lleve a una paz duradera», ha asegurado.
Yamamoto ha insistido en que independientemente del resultado de las elecciones presidenciales de septiembre, que según los primeros resultados oficiales otorgan la reelección a Ashraf Ghani, «la paz será la cuestión de máxima importancia para la nueva administración».
Por ello, ha hecho un llamamiento a todos los actores a «realizar pasos genuinos y concretos hacia el fin de la guerra, ya que no puede haber una solución militar al conflicto en este país», ha defendido el máximo responsable de la ONU en Afganistán.
Naciones Unidas, ha añadido, considera «esencial» que en las conversaciones en pro de la paz participen mujeres y jóvenes y ha venido trabajando con las comunidades en la resolución de disputas sobre la tierra, el agua y otros recursos.
Sin embargo, ha recalcado Yamamoto, «solo poniendo fin a la guerra puede haber esperanza real de un Afganistán con un futuro próspero». «Las esperanzas y aspiraciones de millones de afganos, jóvenes y viejos, mujeres y hombres, niñas y niños, yace sobre los hombros de aquellos que se están esforzando por poner fin a la guerra con una solución política duradera», ha destacado.
Así las cosas, en nombre de la ONU, ha instado a quienes participan en los actuales «esfuerzos de paz a que consideren a los millones de ciudadanos ordinarios, en especial las víctimas del conflicto, que quieren una oportunidad de vivir en paz (…) en un país estable, justo y económicamente próspero y donde sus Derechos Humanos están protegidos».
«Naciones Unidas insta a todos los actores a buscar vías para reducir los niveles de violencia, especialmente la violencia que daña a civiles, en el camino para una solución política duradera y un alto el fuego permanente», ha sostenido el jefe de la UNAMA, subrayando que la reducción de la violencia es «importante para crear un entorno» que facilite las conversaciones entre afganos.