Amor (CEOE) afea al Gobierno «inmiscuirse» en las relaciones labores: «No aceptamos amenazas ni chantajes»

SEVILLA, 15

El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) y vicepresidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Lorenzo Amor, ha criticado este lunes que el Gobierno «se inmiscuya cada vez más» en las relaciones laborales y ha garantizado que la patronal no va a aceptar «amenazas ni chantajes».

Amor se ha pronunciado de este modo en una entrevista en Canal Sur Televisión, recogida por Europa Press, al ser preguntado por el acuerdo alcanzado por el Ministerio de Trabajo con los sindicatos CCOO y UGT para subir el salario mínimo interprofesional (SMI) para 2024 un 5%, desde los 1.080 euros mensuales por catorce pagas hasta los 1.134 euros.

«Nos hubiera gustado llegar a un acuerdo, habíamos propuesto una cifra que estaba entre el 3 y el 4%, pero sorprendentemente el Gobierno que en diciembre nos transmitía que estaba de acuerdo en adecuar la subida del SMI a los contratos públicos y en este caso el Ministerio de Trabajo se desdice en la reunión del pasado lunes 8 de enero, ya no defiende eso y nos hace una pseudoamenaza en la cual nos dice que o aceptamos el 4% o que no atengamos a las consecuencias, ha criticado el presidente de ATA.

Amor ha defendido que desde la CEOE «no tenemos más remedio que rechazar» la subida del 5% del SMI acordada «de forma exprés» por el Ministerio con los sindicatos «por la simple razón de que nosotros no vamos a entrar ni en amenazas ni en chantajes y hemos visto en esta negociación del SMI que ya estaba planteado un castigo a las empresas y a los autónomos».

En su opinión, la decisión del Ministerio de Trabajo de optar por una subida del SMI del 5% en lugar del 4% «no castiga exclusivamente a empresas y autónomos, sino que castiga a todos los ciudadanos, al país, a la generación de empleo y al crecimiento de la economía».

REDUCCIÓN DE LA JORNADA LABORAL SEMANAL

Preguntado por la posición que mantendrá la CEOE ante el acuerdo entre PSOE y Sumar para reducir la jornada laboral semanal desde 2024, el presidente de ATA ha asegurado que «en la negociación colectiva ya hay sectores que están por debajo de esa duración de jornada que se llegó en el acuerdo político», y ha defendido que «la política quede al margen de las relaciones laborales, que se tienen que pactar entre quien cobra la nómina y quien las paga, tanto el salario como la duración de jornada».

«Lo que estamos viendo cada vez más es que la política se inmiscuye en la negociación de convenios y las relaciones laborales», ha lamentado Amor, que ha recordado que el real decreto tumbado la pasada semana en el Congreso «también se saltaba un acuerdo de diálogo social» para «intentar meter la prevalencia de los convenios autonómicos sobre los estatales», algo a los que se ha mostrado convencido de que tanto sindicatos como patronal «nos opondremos».

Sobre los incentivos fiscales para animar a las empresas a volver a Cataluña, el vicepresidente de la CEOE ha calificado como un «despropósito estar hablando de algo que está en contra de la Constitución Española, como es el libre mercado, y de las normas de la Unión Europea sobre la libre circulación de personas, de bienes y de capitales, poniendo encima de la mesa postulados que son ridículos».

«Las empresas deciden dónde desarrollan su actividad teniendo en cuenta muchos factores como la seguridad jurídica, la estabilidad, la paz social o un clima o entorno fiscal que sea amable con las empresas», ha destacado Amor, que ha advertido de que «no podemos olvidar que lo que se produjo en Cataluña fue un golpe de Estado y una situación de inseguridad y de inestabilidad», por lo que considera que «pretender ahora que las empresas vuelvan cuando precisamente se está diciendo que se volvería a repetir, no creo que esté en el espíritu de esas empresas».

2024: UN AÑO DE «INCERTIDUMBRE»

Por último, Amor ha alertado de un empeoramiento de las perspectivas económicas para este año 2024. «Empezamos 2023 creando empleo a un ritmo del 5% y lo terminamos al 2,6%, lo que refleja que el enfriamiento de la economía se ha trasladado a la generación de empleo», ha subrayado.

«Nosotros estimamos que este año vamos a crecer, pero por debajo de 2023, y también se va a generar empleo, pero por debajo de la mitad del que se generó el pasado año», ha vaticinado el presidente de ATA, que ha señalado que «afrontamos un 2024 de incertidumbre porque la inestabilidad política y la precariedad que hemos visto en la última semana política genera desinversión o incluso problemas para la inversión en nuestro país, algo que ponía de manifiesto el propio Banco de España la pasada semana».

Amor ha apostado por esperar a ver la evolución económica de 2024 y ha señalado que «si bien no estamos hablando de recesión ni de destrucción de empleo, sí es verdad que los niveles de crecimiento van a estar muy por debajo de lo que hemos tenido en 2023».

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