Garzón ve «cínico» que Ayuso hable de libertad cuando quiere gobernar con Vox y ser «cómplice del fascismo»
Apela a crear un «cortafuegos» a la derecha en los comicios y cree que la presidenta trata a la gente como «idiotas» para desmovilizarla
El ministro de Consumo y líder de IU, Alberto Garzón, ha calificado de «cínico» que el PP apele a la «libertad» como lema en los comicios madrileños del 4 de mayo cuando es «cómplice del fascismo» al «dejar claro» que quiere gobernar con la extrema derecha.
También ha acusado al PP y a la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, de querer convertir a la gente en «idiotas» promoviendo su desinterés en la política mediante el «odio» y ha animado a la movilización en estas elecciones para crear un «cortafuegos» que impida un hipotético gobierno regional con PP y Vox.
Así lo ha manifestado durante un acto electoral de Unidas Podemos en la localidad de Alcalá de Henares para arropar al candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Pablo Iglesias. Unos comicios que suponen una «oportunidad» que la ciudadanía progresista debe aprovechar de cara a poner fin a 25 años de gobiernos del PP, que «sistemáticamente» han perjudicado a las familias trabajadoras y humildes.
Y es que el ministro de Consumo ha recriminado al PP que haya utilizado la Comunidad de Madrid como el «epicentro muy claro» de su «corrupción», con una «red clientelar» que ha saqueado «fondos públicos en su beneficio».
Aunque el ejemplo más ilustrativo de ello sea el conocido como caso Bárcenas (en alusión al extesorero del PP Luis Bárcenas), Garzón ha remarcado que también se nota «cuando se mete la mano en los presupuestos» para «sistemáticamente» impedir el acceso a servicios públicos de calidad.
Además, ha censurado que las políticas del PP y Ayuso buscan «desvertebrar» a España mediante una «competencia fiscal» que busca atraer a los «ricos de toda España» y dejar sin recursos al resto de autonomías. Un elemento que han reiterado con su propuesta de reforma fiscal autonómica, que se dirige a las «clases altas».
Por otro lado, el coordinador federal de IU ha dicho que es «cínico» que el PP hable de libertad en esta campaña cuando precisamente es una conquista de miles de personas trabajadoras que se enfrentaron al franquismo.
PP Y VOX SON UN PELIGRO
A continuación, Garzón ha llamado la atención sobre la «anomalía» que supone el PP con respeto al resto de la derecha europea, que es conservadora pero también «antifascista» y, por ello, se niegan a pactar con la ultraderecha. De esta forma, ha recalcado que la diferencia de la derecha española respeto a la del resto de la UE es que «no tiene una matriz antifascista».
Todo ello le ha llevado a afirmar que esa posible alianza entre PP y Vox constituye un «peligro» para las libertades y los derechos civiles, sociales y económicos.
A su vez, ha criticado que se dedican a «embarrar» la política y a «promover odio» porque aspiran a que la gente «no salga a votar» y no se interese por la política. «El PP y Ayuso quieren convertirnos en idiotas», ha lanzado el ministro de Consumo para aludir a la etimología griega de esta palabra, que en su raíz conceptual aludía a la gente que no se interesaba por los asuntos públicos.
Por todo ello, ha acusado a la derecha de buscar «inyectar odio» dando «vía a la extrema derecha» y promoviendo «fake news» con la intención de que la gente se quede en su casa el 4M y así tener opciones de retener el poder.
IGLESIAS DARÁ «LA VUELTA A LA TORTILLA»
La solución a esta estrategia para Garzón es «politizar a todo el mundo» y ha pedido un «esfuerzo adicional» para movilizar al electorado progresita que permita conformar un gobierno alternativo, presidido por Iglesias, que termine con los 25 años del PP en la región.
Del candidato de Unidas Podemos ha enfatizado su compromiso de cara a extender derechos y «ensanchar» las posibilidad de la ciudadanía de Madrid, sobre todo para las clases más necesitadas, al dar «la vuelta a la tortilla» de lo que viene haciendo el PP. Finalmente, ha destacado que apoyar a Iglesias supone un «voto de esperanza» ante el «miedo» que genera Ayuso.