Santander llega a un preacuerdo con sindicatos para abrir por las tardes 1.000 oficinas

Los representantes sindicales advierten de que todavía hay cabos sueltos en la negociación

La mayoría de los trabajadores de Banco Santander valoran «positivamente» el documento presentado ayer por la entidad, en el que se propone que el personal trabaje de lunes a jueves en horario flexible y cumpla con dos tardes de trabajo a la semana, según han confirmado a Europa Press fuentes de UGT.

De esta forma, el logro del planteamiento de la firma de un preacuerdo con CCOO, Sindicatos de Trabajadores del Santander (STS), Cgrupo, SITC y posiblemente Amic, permite prosperar en las negociaciones. No obstante, UGT y otros sindicatos minoritarios rechazan el planteamiento actual.

El banco cántabro puso sobre la mesa de negociación de la homologación de las condiciones laborales de los trabajadores del Santander y el Popular en el marco de su fusión una propuesta alternativa aunando en parte las condiciones que estas organizaciones pedían. «La verdad es que la entidad ha hecho un esfuerzo respecto a la homologación de las condiciones entre los trabajadores del Santander y del Popular», admiten dichas fuentes. No obstante, subrayan que ha dejado temas «muy importantes y sensibles» por el camino.

El Santander propone así que el personal especializado de las 1.000 sucursales remodeladas, conocidas como Smart Red , trabajen de lunes a jueves con horario flexible –entrada entre las 8.30 y 9.00 horas, y salida entre las 14.00 y 14.30 horas– con dos horas de trabajo por las tardes dos días a la semana –entrada entre las 16.00 y 16.30 horas, y salida entre las 18.00 y 18.30 horas–.

Cada empleado deberá hacer un máximo de 100 tardes presenciales al año, por lo que las fuentes consultadas opinan que, aunque en el papel se exponga así, en realidad los trabajadores deberán hacer más horas. El banco rojo pide que se trabajen como mínimo dos tardes semanales, pero si se dividen las 100 tardes presenciales entre la jornada anual, las cuentas apuntan a 2,2 tardes al año.

Asimismo, las condiciones propuestas por el Santander implican una modificación de la bolsa de horario de formación, a cuenta de trabajo y reuniones, que incrementan con las horas que sobran de 25 a 45 horas, de manera que si se trabaja dos horas a la semana por la tarde supondría veintidós tardes más, lo que eleva el mínimo a tres tardes semanales. Según explican a Europa Press las fuentes, en caso de que a algunos empleados no les coincidan las vacaciones en verano, el mínimo semanal de tardes a trabajar ascendería a cuatro.

De igual forma, critican que no exista un registro de llamadas, solamente un «decálogo de buenas intenciones» en el que se promueve la autonomía, la responsabilidad, la conciliación familiar o el uso de tecnología. «Si bien todo esto al final choca con otros requisitos, por lo que el acuerdo en sí es un poco contradictorio», subrayan.

CUANTÍA ECONÓMICA «INSUFICIENTE»

Por otro lado, los sindicatos consideran que la cuantía económica es «insuficiente», ya que Caixabank y Bankia, por ejemplo, ofrecen a sus empleados 4.000 y 4.500 euros brutos más comidas, mientras que Santander propone 3.500 euros brutos sin comidas.

En suma, las fuentes consideran que existen aún muchos temas «arbitrarios» que no pueden ser firmados, por lo que hay condiciones que deberán ser reformuladas para poder firmar de forma definitiva el documento. «Algunos grupos sindicales se han mostrado proclives a firmar un preacuerdo, pero nosotros y otros minoritarios no estamos dispuestos a firmar así», señalan.

CCOO, Sindicatos de Trabajadores del Santander (STS), Cgrupo, SITC y posiblemente Amic, aunque todavía se muestra «un poco dudoso», son las organizaciones que valorarían positivamente el documento presentado por Santander y estarían pensando en firmar un preacuerdo, frente a la postura de UGT y el resto de sindicatos minoritarios, que rechazan el planteamiento actual.