Zualoga asegura que la futura Ley de Ciencia de Cantabria «corregirá los lastres» a la investigación

Cree que una financiación adecuada, dar estabilidad laboral a los investigadores y agilizar la burocracia

El vicepresidente regional y consejero de Universidades, Igualdad, Cultura y Deporte, Pablo Zuloaga (PSOE), ha asegurado que la Ley de Ciencia y Transferencia de Cantabria, que previsiblemente llegará este año al Parlamento regional, «corregirá los lastres» que «frenan» la investigación en Cantabria.

Considera que esta norma autonómica contribuirá a garantizar la inversión en investigación, dará estabilidad laboral a los investigadores y reducirá la burocracia «para ser ágiles y eficientes».

Así lo ha defendido este martes durante su intervención en el Foro de la Ser, que ha sido de forma telemática ya que desde hace días se encuentra confinado al haber dado positivo por Covid dos familiares convivientes.

En esta sesión, que ha versado sobre La investigación como pilar fundamental de la sociedad y que se ha celebrado en la Facultad de Derecho también han participado el rector de la Universidad de Cantabria, Ángel Pazos, y la investigadora y catedrática de Farmacología, María Amor Hurlé.

Zuloaga ha reivindicado también la necesidad de una apuesta política por la investigación como elemento central para cambiar el modelo productivo de la comunidad autónoma y propiciar el retorno de los jóvenes investigadores cántabros, ha informado en un comunicado el Gobierno regional.

«Si queremos potenciar este modelo tenemos que ser consecuentes en las decisiones que se toman desde la responsabilidad política», ha afirmado.

«LECTURA CRÍTICA» DE LA INVESTIGACIÓN EN CANTABRIA

El vicepresidente ha comenzado su intervención haciendo una «lectura crítica» de la situación de Cantabria en cuando a inversión en investigación, donde la comunidad ocupa el puesto undécimo del conjunto del país.

Sin embargo, ha subrayado el compromiso presupuestario de su departamento y ha recordado que los Presupuestos de Cantabria para 2020, antes de que la pandemia evidenciara la importancia de la ciencia, ya se incluyó, por primera vez, una partida de 200.000 euros para financiar proyectos de transferencia del conocimiento, cantidad que, debido a la crisis COVID, se elevó hasta los 400.000 euros y que para 2021 cuenta con una inversión de 500.000 euros.

Además, a ello hay que añadir el contrato-programa con la UC, que, según ha resaltado, ha alcanzado la «cifra histórica» de 82,3 millones.

También ha asegurado que existe un «diálogo permanente» con el sector, que, según ha explicado, ha dado lugar al Pacto por la Ciencia respaldado, por unanimidad, en el Parlamento de Cantabria, algo que, a su juicio, es «un paso importantísimo para blindar los derechos de los investigadores y las investigadoras, gobierne quien gobierne».

Sin embargo, para Zuloaga el impulso definitivo a la ciencia y la investigación en Cantabria llegará con la Ley de Ciencia y Transferencia, que, según ha expuesto, abordará los «grandes déficit» de Cantabria en esta materia; creará la Agencia Cántabra de Investigación y Transferencia, y «pondrá el listón muy alto a todos, tanto a las Administraciones Públicas como al tejido productivo».

Sobre este aspecto, el vicepresidente ha pedido al sector privado a que «reme en la misma dirección» porque, además, «las empresas que más han invertido en I+d son las que mejor han soportado el impacto de la crisis». «Es fundamental que el Gobierno vaya un paso por delante para que arrastre esa inversión en el ámbito privado», ha señalado.

También ha avanzado que la Agencia Cántabra de Investigación y Transferencia será una «herramienta ágil» de la Administración, y dará soporte a los equipos de investigación» para reducir el exceso de burocracia y los «conflictos administrativos» y ha explicado que Cantabria está aprendiendo de la experiencia de otras comunidades que cuentan con este recurso, como País vasco y Navarra.

Zuloaga también se ha referido a otra «brecha» que, a su juicio, limita el avance de la investigación, como es, según ha dicho, la brecha de género.

En este sentido, ha asegurado que la corresponsabilidad en el ámbito laboral y también investigador formará parte de la propuesta del Gobierno regional para acceder a los fondos europeos de recuperación «que ofrecen la posibilidad de pensar qué Cantabria queremos en el futuro». «Vamos a dedicar recursos para que el talento femenino invisibilizado en la sociedad tome ese poder», ha añadido.

Tanto Pazos como Hurlé han coincidido, según el Gobierno, con el vicepresidente en el diagnóstico sobre la situación de la investigación en Cantabria que, según el rector, al igual que en el resto del país, «adolece» de financiación y de planificación y gestión.

Aunque ha reconocido un «leve repunte» en inversión en los últimos años, lo sigue considerando «claramente insuficiente» y cree que posiciona a España por debajo de lo que le correspondería como país.

Además, Pazos ha destacado el «endurecimiento de requisitos burocráticos» que en su opinión «hay que frenar» definiendo «un modelo de gestión y fiscalización razonable», en línea con lo que ha expuesto Zuloaga, y ha reconocido que queda «un camino muy largo» en transferencia del conocimiento.

Los tres intervinientes han coincidió en señalar también las dificultades de los jóvenes investigadores cántabros para volver a la comunidad autónoma tras su formación fuera de Cantabria, una «fuga de talento» que, según Zuloaga, el Ejecutivo quiere atajar, entre otras herramientas, con la Agencia y la apuesta por la estabilidad laboral.

Para Hurlé «es absolutamente imprescindible que las instituciones públicas sean conscientes de este problema que requiere una solución urgente».

La catedrática ha asegurado que la investigación es «necesaria, obligada y rentable», tres cualidades que, si bien no se han sabido «vender», según ha reconocido Pazos, la crisis sanitaria ha puesto de relieve.

«Si alguien pensaba que la investigación no es fundamental, loque ha pasado en el último año debería abrir todas las mentes», ha asegurado el rector, que destacado el esfuerzo presupuestario y de tiempo que ha supuesto la llegada de las vacunas.

Zuloaga ha recordado también que durante los meses de pandemia las buenas noticias llegaban de los institutos de investigación y del hospital Valdecilla, también puntero en este aspecto, y ha reconocido «gran trabajo que hay detrás», y que «requiere de «políticas de largo recorrido». «En investigación hay que dedicar recursos, no se puede improvisar», ha añadido el vicepresidente.