Yibuti investiga un ataque contra terroristas cerca de la frontera con Etiopía tras registrar víctimas civiles
El Ministerio de Defensa de Yibuti ha anunciado este domingo que ha iniciado una investigación sobre un ataque con drones llevado a cabo durante la semana contra un grupo terrorista en la ciudad de Addorta, cerca de la frontera con Etiopía, puesto que se han registrado víctimas civiles.
«Después del ataque, ocho terroristas fueron neutralizados en el lugar. Lamentablemente, se informó de daños colaterales entre los civiles yibutianos presentes en la zona. Estamos llevando a cabo una investigación para determinar las circunstancias exactas de su presencia en la zona y se ha enviado ayuda humanitaria para apoyar a los afectados por este trágico incidente», reza un comunicado.
La cartera ministerial ha explicado que el ataque tuvo lugar la noche del jueves al viernes a unos seis kilómetros de la frontera con Etiopía. «Este sitio, identificado como una base logística y operativa utilizada por elementos terroristas, había estado bajo vigilancia durante una semana como parte de una misión de reconocimiento», ha indicado.
Así, ha señalado que «el grupo terrorista presente en esta base estaba cometiendo acciones hostiles, incluidas infiltraciones por tres rutas diferentes, constituyendo una amenaza potencial para (sus) puestos avanzados, así como para la infraestructura del Lago Assal». «Además, estaban llevando a cabo secuestros contra maestros de escuelas rurales y amenazando la seguridad del corredor Lago Assal-Tadyura», ha agregado.
Sin embargo, fuentes consultadas por el diario etíope Addis Standard han señalado que el ataque ha tenido lugar en territorio etíope, en la aldea de Siyaru Kebele, que está ubicada en el distrito de Elidar, y que ha dejado al menos ocho muertos, incluida una mujer embarazada, y cuatro heridos.
Según dichas fuentes, que remarcan que no se ha confirmado un balance definitivo de las víctimas, se trata de «la segunda vez en dos meses» que el Gobierno de Yibuti ataca la zona, al menos esta vez «con el pretexto de atacar» al grupo rebelde Frente por la Restauración de la Unidad y de la Democracia (FRUD).
