Vox dice que no es «la ONU» sino tres «relatores» que quieren agradar a Sánchez quienes censuran las leyes de concordia
Ven la respuesta a la denuncia del Gobierno una «burda estafa publicitaria» y dice que no cederán «ni un milímetro»
Vox considera una «burda estafa publicitaria» el aviso de Naciones Unidas sobre las «leyes de concordia» que esta formación y el PP están impulsando para contrarrestrar las medidas previstas en la ley estatal de Memoria Democrática. Desde el partido de Santiago Abascal recalcan que no es «la ONU» la que ha lanzado esta advertencia sino que lo han hecho «tres relatores» que «trabajan» para la organización multilateral y que buscan agradar al presidente español, Pedro Sánchez.
El informe de los tres relatores es la respuesta a la denuncia presentada por el Gobierno ante la ONU contra las denominadas «leyes de concordia» que han sido tramitadas Aragón, Castilla y León y la Comunidad Valenciana.
El Ejecutivo central elevó la cuestión a la ONU al considerar que estas normas son «contrarias» a los valores recogidos en la Ley de Memoria Democrática y ahora la ONU le ha instado a tomar medidas porque considera que las normas impulsadas por el PP y Vox pueden «invisivilizar» las «graves violaciones de los Derechos Humanos» cometidas durante el «régimen dictatorial franquista».
Tras conocer el documento, fuentes de Vox han incidido en que «el autor del informe no es la ONU, sino tres relatores que, además de trabajar para la ONU, ahora han elaborado este informe a petición del Gobierno de Sánchez». «Probablemente lo hagan porque les interese llevarse bien con Moncloa después de ver cómo se enriquece todo el entorno del presidente, incluidos compañeros socialistas con contratos de pandemia», deslizan.
SÓLO AUXILIAN A GOBIERNOS OBEDIENTES
Para los de Santiago Abascal, la respuesta de la ONU «evidencia para qué sirven estos organismos globalistas», a los que acusa de actuar sólo para «auxiliar a los gobiernos obedientes con la Agenda 2030 cuando necesitan una cortina de humo», pero no para «ayudar a los países a solucionar las necesidades reales y concretas» de sus poblaciones.
Así, además de descalificar la posición de los relatores, desde el partido avanzan que no van «a ceder ni un milímetro» en preservar la libertad que, desde su punto de vista «atacan las leyes de memoria del consenso progre» y que perseverarán en el contenido de las leyes de concordia con las que, según argumentan, persiguen «la defensa de la memoria de todas las víctimas de violencia, la protección de la concordia y la unidad entre españoles».
Es más, reivindican estas normas porque «han permitido que deje de haber víctimas de primera y de segunda según el bando en el que lucharon los españoles hace casi 100 años; que se proteja todo el patrimonio histórico y monumental; y que no se persiga a nadie por sus opiniones sobre la historia de España».
INFLUIR EN UN PAÍS SOBERANO
Además, acusan a los relatores de la ONU de pretender «influir» en la tramitación parlamentaria «de un país soberano» habida cuenta de que estas leyes aún no han finalizado su recorrido parlamentario ni Castilla y León ni en la Comunidad Valenciana.
Asimismo, desde Vox se quejan de que los relatores no se pronuncien «cada vez que asociaciones financiadas por el Gobierno han enterrado de vuelta cadáveres exhumados sólo porque no les gustaba el bando en que habían luchado en la Guerra Civil». También lamentan que no se interesen por las «invasiones migratorias», «el aumento de los delitos sexuales» o «los homenajes a etarras de los socios de Sánchez».