Verstrynge (Podemos) defiende el municipalismo como herramienta de protección ante la inflación y desafección política

Reconoce que puede haber «frustración» porque, por muchos cambios que quieran impulsar», no siempre todo está de su lado «para empujarlos»

VITORIA, 2

La secretaria de Organización de Podemos, Lilith Verstrynge, ha defendido el municipalismo como «herramienta» ante la desafección política y para proteger a las familias ante la inflación. Asimismo, ha reconocido que puede haber «frustración» porque, por muchos cambios que quieran impulsar» desde el partido, no siempre todo está de su lado «para empujarlos».

Verstrynge ha realizado estas manifestaciones en la localidad alavesa de Arcos de Quejana donde Podemos ha celebrado el encuentro Udalak Martxan para abordar, junto su militancia, los retos y líneas de actuación estratégicas de cara a las elecciones municipales y forales del próximo año.

En el acto de apertura, Lilith Verstrynge ha destacado que, como organización política, tienen dos retos «muy grandes encima de la mesa», el de la desafección política y el de las consecuencias de la guerra de Ucrania, a los que deben «poner inteligencia colectiva».

Uno de esos retos es el de hacer frente a las consecuencias de la guerra en Ucrania, que ha traído «una situación de segunda, tercera crisis económica» en España con unos niveles de inflación «altísimos».

Lilith Verstrynge ha afirmado que es algo a lo que «evidentemente» habrá que «ponerle soluciones» y, sobre, todo «ayudar a la gente a protegerse contra esa subida de los precios».

En este sentido, cree que la política municipal puede ser «una buena herramienta» para hacer frente a estos dos retos porque «lo local es la primera instancia en la que la ciudadanía toma contacto con la política».

MUNICIPALISMO

«Y en un momento de desafección política, qué mejor manera de rellenar la política de nuevo de sentido que acercarse a la gente a través de la política municipal, el municipalismo es, por su tradición e historia, la manera más efectiva de hacer política directa. Es cercanía, es autogobierno, es lo que nos permite recuperar la esfera pública para ejercer, además, una ciudadanía y una libertad auténticas», ha añadido.

Por lo tanto, cree que hay que intentar convencer «con el boca a boca», que «ahora más que nunca» se necesita la política y que «pensar un proyecto de país no es única y exclusivamente pensar en términos abstractos, estructurales como podría hacerse desde un gobierno estatal sino que es también pensar como queremos que sea el día a día de nuestros vecinos».

Por ello, ha insistido en que «más que nunca» deben reivindicar esa idea de «municipalismo fuerte» en Podemos, al que se ha criticado por no haber «dedicado el suficiente esfuerzo a hacer organización». En este sentido, ha asegurado que son conscientes de que han tenido un «atropello de elecciones tras elecciones» y es posible que hayan dedicado su «capacidad e inteligencia política a la comunicación y menos a la estructura».

«Eso ha generado que en ocasiones nuestra militancia se cansase y dijese dónde estáis, por qué os vemos todos los días en la televisión o en los platos y no en los encuentros, en las reuniones, en los mítines, en todas estas cosas que estamos haciendo aquí y ahora», ha agregado.

En este sentido, ha afirmado que ahora que se está en «una nueva etapa con una nueva dirección», tienen que poner «mucha atención y mucho esfuerzo» en la política municipal porque «es lo que devuelve la política a su acepción original».

En su opinión, municipalismo es «comunidad, asociación y acción directa», que es lo que «necesita ahora mismo». Lilith Vestrynge ha manifestado que, si se habla de la economía «real, de la de los hogares» y el día a día de «llenar la cesta de la compra, el depósito del coche y pagar la factura de la luz», se pueden hacer «cosas» desde el Gobierno central y ha recordado que se han tomado medidas como la bajada de precios de los bonos de transporte, las ayudas económicas directas o el futuro impuesto extraordinario a los beneficios de las eléctricas, que espera que el PSOE «cumpla y lo saque adelante».

No obstante, cree que el efecto del «escudo protector» contra la inflación es aún «más efectivo», si se actúa desde todas las esferas y ha añadido que medidas como la remunicipalización del agua, la creación de una empresa pública de energía o de un dentista municipal, además de otras políticas municipales, «sirven tanto o lo mismo que un IMV o que la subida del SMI para frenar la desigualdad y favorecer la protección de las familias frente a las consecuencias de la inflación».

«Parecen políticas pequeñas pero son políticas muy grandes y de gran alcance», ha manifestado Vestrynge, que ha animado a sus compañeros vascos a seguir recorriendo Euskadi, «sin dejar un solo municipio».

DESAFECCIÓN POLÍTICA

En relación a la desafección política, ha señalado que, tras dos años de pandemia en los que no se ha podido «conversar, intercambiar y debatir», es una realidad que España atraviesa una «situación de desafección política en la que hay mucha gente que se siente cada vez más despegada y más separada de cierta clase política y, por tanto, de la política en sí».

A su juicio, ello viene producido por una serie de motivos y uno puede tener que ver con su organización» y que tienen que «hacerse cargo y solucionar».

En concreto, ha aludido a lo que puede ser la «frustración» que se genera cuando entras en un gobierno de coalición en minoría «con unas expectativas políticas de cambio, de asalto a los cielos, de darle la vuelta por completo al sistema» y la realidad con la que te encuentras es un gobierno de coalición, por primera vez en la historia democrática del país, con Podemos en minoría y «una serie de límites dentro del sistema que hacen visible que, por muchos cambios que quieras llevar adelante, no siempre todo va a estar de tu lado para que puedas empujarlos».

La secretaria de Organización cree que hay que ser «muy conscientes» de esa situación y saber que no se está «en un momento de grandes mítines» sino, probablemente, más en un momento del «cara a cara, de ir a ver a los vecinos, hablar con ellos acercarnos y convencerles».

«Que sea mucho más humilde, nada de grandes mítines y abrirlas las alamedas, no pasa nada es otra manera de hacer política, son otros tiempos y hay que adaptarse y, si hay una organización política que ha sabido reinventarse, adaptarse y reconstruirse, no para ser un partido al uso sino para ser una herramienta que sirve para que la gente lo sienta cercano y que resolvemos cosas en su día a día y que servimos para algo, somos la gente de Podemos», ha añadido.