Venezuela califica de «campaña de agresión» la prórroga de las sanciones de EEUU
El Gobierno de Venezuela ha expresado este miércoles su «enérgico» rechazo a la prórroga del llamado decreto de emergencia nacional impuesto por Estados Unidos con el que busca imponer sanciones y restricciones de visado a sus autoridades, que Caracas enmarca dentro de una «campaña de agresión» contra el pueblo venezolano.
«Con esta acción innecesaria, absurda y hostil queda demostrado que el liderazgo decadente de Estados Unidos no está en capacidad de diseñar una política exterior coherente que no se base en la coerción, el chantaje», denuncia el Ministerio de Asuntos Exteriores de Venezuela en un comunicado.
«Estados Unidos es rehén de sus propias políticas de agresión. La crisis migratoria ente la cual tantos operadores políticos muestran preocupación no es sino consecuencia directa e inmediata de sus medidas coercitivas», apunta el texto, en el que se advierte de que estas medidas violan el Derecho Internacional.
Venezuela, no obstante, ha apuntado que la medida estadounidense es previsible y que «no se puede esperar otra cosa de un gobierno que normaliza y banaliza el genocidio contra el pueblo palestino» y permanece «indiferente» ante el menoscabo de los derechos civiles de sus minorías.
«El pueblo venezolano no se ha doblegado ante estas agresiones ni lo hará jamás (…) No importa lo que haga Estados Unidos, Venezuela es un país decidido a ser libre y prevalecerá», cierra el comunicado de Exteriores.
En la víspera, Estados Unidos justificó la prórroga de esta medida alegando la supuesta erosión de los Derechos Humanos bajo el mando del presidente Nicolás Maduro, la persecución de opositores, la restricciones a la libertad de prensa, o el uso de fuerza indiscriminada en protestas contra el Gobierno.
La renovación del decreto tuvo lugar también el mismo día en el que el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela anunció que las próximas elecciones presidenciales se celebrarán el 28 de julio, en las que no estará la inhabilitada opositora María Corina Machado.