Vapear durante apenas 30 minutos puede aumentar el riesgo de enfermedades, según un estudio
Una sola sesión de 30 minutos de vapeo puede aumentar significativamente el estrés oxidativo celular, que se produce cuando el cuerpo tiene un desequilibrio entre los radicales libres (moléculas que pueden causar daño a las células) y los antioxidantes, que combaten los radicales libres, según los resultados de un estudio de la Universidad de California en Los Ángeles (Estados Unidos).
El riesgo que tanto el tabaco como los cigarrillos electrónicos pueden suponer para la salud de los fumadores habituales está bien documentado, pero este nuevo estudio, publicado en la revista JAMA Pediatrics , ilustra la rapidez con la que el vapeo puede afectar a las células incluso de los jóvenes no fumadores sanos.
«Con el tiempo, este desequilibrio puede desempeñar un papel importante en la causa de ciertas enfermedades, como las cardiovasculares, pulmonares y neurológicas, así como el cáncer», explica la autora principal del estudio, la doctora Holly Middlekauff.
Los cigarrillos electrónicos, dispositivos que suministran nicotina con saborizantes y otras sustancias químicas en forma de vapor en lugar de humo, son vistos por muchos como una alternativa más segura a los cigarrillos normales, pero las investigaciones de Middlekauff y otros científicos han demostrado que el vapeo se asocia con una serie de cambios adversos en el cuerpo que pueden presagiar futuros problemas de salud.
Para este estudio, 32 participantes masculinos y femeninos, con edades comprendidas entre los 21 y los 33 años, se dividieron en tres grupos: 11 no fumadores, nueve fumadores habituales de cigarrillos de tabaco y 12 fumadores habituales de cigarrillos electrónicos. Middlekauff y sus colegas recogieron células inmunitarias de cada individuo antes y después de una sesión de vapeo de media hora para medir y comparar los cambios en el estrés oxidativo entre los grupos.
Los investigadores llevaron a cabo el mismo proceso durante una sesión de control en la que los participantes pasaron 30 minutos fumando en falso , es decir, fumando con una pajita vacía.
Descubrieron que, en los no fumadores, los niveles de estrés oxidativo eran de dos a cuatro veces mayores después de la sesión de vapeo que antes. Los investigadores señalaron que la misma exposición de 30 minutos no produjo un aumento del estrés oxidativo entre los fumadores habituales de cigarrillos y de cigarrillos electrónicos, probablemente porque sus niveles iniciales de estrés oxidativo ya eran elevados.
«Nos sorprendió el efecto que una sola sesión tiene en jóvenes sanos», alerta Middlekauff. Los resultados son especialmente preocupantes, según los investigadores, porque la popularidad del vapeo sigue aumentando, especialmente entre los adolescentes y los adultos jóvenes.
Los investigadores afirman que aún queda por saber qué es lo que provoca exactamente los cambios en los niveles de estrés oxidativo, ya sea por la nicotina o por los elementos no nicotínicos de los cigarrillos electrónicos. Middlekauff y su equipo seguirán explorando esta cuestión en futuras investigaciones.
«Aunque existe la idea de que los cigarrillos electrónicos son más seguros que los de tabaco, estos resultados demuestran de forma clara y definitiva que no existe un nivel seguro de consumo. Los resultados son claros, inequívocos y preocupantes», remacha Middlekauff.