Valero (IU) suscribe una iniciativa de Sumar para impulsar un sistema de bajas estudiantiles por temas de salud mental
MADRID/SEVILLA, 14
El Grupo Parlamentario Plurinacional Sumar, del que forma parte el coordinador de IU Andalucía, Toni Valero, ha registrado una proposición no de ley (PNL) en el Congreso de los Diputados para «impulsar un sistema de bajas estudiantiles dirigido a aquellos que padecen problemas de salud mental».
De esta manera, esta iniciativa busca «abordar la creciente crisis de salud mental entre los jóvenes y adolescentes en España, cuyos índices superan la media europea y global», según han explicado este viernes desde IU en una nota.
Así, desde Izquierda Unida han puesto de relieve que, según los datos presentados por Unicef, el 16,3% de los adolescentes españoles presenta diagnósticos relacionados con problemas de salud mental, cifra que supera «en cuatro puntos la media europea».
Además, el 50% de los trastornos mentales comienzan antes de los 18 años, y el suicidio se ha convertido en la primera causa de muerte entre jóvenes de 12 a 29 años. A pesar de estas «alarmantes cifras», más de la mitad de los jóvenes que manifiestan problemas de salud mental no solicitan ayuda, y un tercio no habla con nadie sobre sus dificultades, advierten desde IU.
La referida PNL destaca la «falta de confianza» de los estudiantes en los orientadores y tutores de sus centros educativos, así como «la insuficiente formación y tiempo que estos profesionales tienen para abordar adecuadamente los problemas de salud mental».
Además, se subraya la necesidad de introducir programas de «promoción del bienestar emocional» y de «prevención y detección temprana de problemas de salud mental en los centros educativos, así como mejorar la coordinación con las instituciones sanitarias y sociales».
El coordinador de IU Andalucía y diputado por Málaga, Toni Valero, argumenta que «si un trabajador que padezca estos trastornos tiene derecho a una baja laboral, por qué no puede ser así para un estudiante», al tiempo que advierte de que si los estudiantes dejan de ir a clase «sufren consecuencias graves por carecer de este derecho, como pérdida de becas o una bajada en las calificaciones».
Por todas estas razones, la PNL reclama «el sistema de bajas estudiantiles en estudios postobligatorios», así como «una mejora en las adaptaciones del proceso educativo para estudiantes con diagnósticos de problemas de salud mental», y «el refuerzo del personal en los centros educativos».
La PNL también hace hincapié en la «desigualdad socioeconómica» que afecta a los estudiantes con problemas de salud mental, señalando que aquellos con menos recursos económicos tienen «mayores dificultades para acceder a tratamientos adecuados».
Valero afirma que «esto afecta más a estudiantes de clase trabajadora», ya que hay «una relación directa entre la situación socioeconómica de las familias y el rendimiento académico». Por ello, se propone que las adaptaciones en el estudio y el cuidado de la salud mental sean consideradas como «medidas de justicia y redistribución».
En palabras de los diputados firmantes, «es urgente que el sistema educativo cuente con los mecanismos necesarios para adaptarse a las necesidades de los estudiantes que sufren problemas de salud mental». «No podemos permitir que la falta de recursos o la presión académica agraven una situación que ya es crítica», subrayan desde Sumar al justificar esta iniciativa.