Urkullu niega que haya convocado ya elecciones y dice que, si alguien cree que son mejor tras el verano, que lo diga
Advierte de que «el proceso de transición será largo y duro» y no se recuperarán «a corto plazo los hábitos sociales previos» a la crisis
BILBAO, 24
El Lehendakari, Iñigo Urkullu, ha negado que haya convocado ya las elecciones vascas para el mes de julio, al adelantar en su comparecencia en la Diputación Permanente esta fecha como una las opciones que está barajando, y ha afirmado que, si alguien cree que es mejor celebrarlas en septiembre u octubre porque creen que la situación por el coronavirus será «mejor, que lo diga».
En su segundo turno de réplica durante su comparecencia en la Diputación Permanente, Urkullu ha preguntado a los grupos si se han quedado «solo con lo de las elecciones» de sus dos intervenciones previas y si han entendido que había «convocado las elecciones». Además, ha indicado que, si es así, «poco rigor tienen», teniendo en cuenta lo que acordaron todos los partidos para dejar sin efecto la convocatoria de elecciones del 5 de abril.
El presidente del Gobierno Vasco ha recordado que, entonces, decretó que dejaba sin efecto esa fecha y se establecía que la nueva cita electoral se convocará «oídos los partidos, una vez levantado el decreto de emergencia sanitaria».
El Lehendakari ha señalado que eso es lo que acordaron los grupos, y lo que está planteando es «una convocatoria a los partidos con tres meses de antelación para lo que pudiera ser una convocatoria electoral» que pudiera celebrarse en julio.
A su juicio, hay tiempo para reflexionar «y, evidentemente el levantamiento del decreto de emergencia sanitaria, tendrá que ser con criterios científicos».
Iñigo Urkullu, que ha recordado las circunstancias que ya se están produciendo en cumplimiento de las seis recomendaciones de la OMS y de su comisión de expertos en Europa, ha manifestado que hay «semanas por delante para reflexionar, para valorar» sobre las «incertidumbres» que son «las que abocan también a pensar en el otoño».
«Si alguien está pensando que, por la razón que sea, no conviene que sean en el mes de julio, sin tener en cuenta las explicaciones que he dado, los tres pasos que he dado a la hora de hacer el planteamiento de reflexión entre los partidos, oídos los partidos. Si alguien tiene la certeza de que en octubre o en septiembre vamos a estar mejor, sin ninguna prueba científica, que lo diga», ha manifestado.
Urkullu ha indicado que «quedarse con eso y, además de manera distorsionada», cuando lo que plantea es una mesa de partidos para cumplir lo establecido en el decreto por el que se dejó sin efecto la fecha del 5 de abril, supone «un abismo, mucho más allá de lo que ha sido el contenido de mis intervenciones.
Además, ha recordado que antes de ayer planteó a la ministra de Política Territorial, Carolina Darias, que no solo en Euskadi, sino en el conjunto del Estado español, en relación a la desescalada y en un «trabajo compartido», habría elementos que «habría que abordar ya en función del tiempo anual que corresponde gestionar y, entre ellas, la de las elecciones».
En este sentido, ha señalado que, aunque su fecha es «competencia, facultad, y potestad» suya, entiende que tiene un acuerdo de escuchar a los partidos antes, «y siempre y cuando se pueda haber levantado la declaración de emergencia sanitaria».
Urkullu ha insistido en que están apuntando a la convocatoria de julio, por lo que «quedaría por delante tres meses», pero ha recordado que tienen que pasar 54 días desde que se publica en el Boletín Oficial del País Vasco (BOPV) la fecha de la cita electoral.
«Por lo tanto, si hay que cumplir con 54 días, algún tiempo antes tendremos que hablar de cuáles son las circunstancias que se nos presentan ahora y que se nos puedan presentar», ha señalado.
El Lehendakari ha asegurado que las reuniones de los presidentes autonómicos con Pedro Sánchez de los domingos «no solo sirven para hacer crítica», y ha asegurado que él ha realizado, sobre todo, propuestas, algunas de las que han tenido, luego, su implantación en el conjunto del Estado.
Asimismo, ha apuntado que también ha mantenido reuniones previas con máximos representantes de comunidades autónomas, «de diferente cariz ideológico-político», para que se presentaran en estos encuentros planteamientos.
DESECALADA
También ha reiterado que su Gobierno trabaja en un plan de desescalada «con todo rigor», siguiendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Este plan, según ha precisado, lo está compartiendo con el Gobierno español.
El Lehendakari se ha dirigido a la ciudadanía para advertir de que «el proceso de transición será largo y duro». «No podremos recuperar a corto plazo los hábitos sociales previos a la epidemia. Por eso hablamos de una nueva normalidad», ha indicado.
Asimismo, ha manifestado que, en los próximos meses, puede haber nuevos casos de contagios, por lo que corresponde al Gobierno Vasco «organizar una respuesta sanitaria efectiva». «Estamos preparados para ello, pero no es suficiente. El compromiso individual y colectivo con decisivos. Debemos dar continuidad a la enorme labor realizada hasta ahora», ha aseverado.
También ha señalado que, si se está mitigando el virus, «ha sido, en gran medida, al compromiso de personas y de familias que han cumplido con las medidas establecidas».
Iñigo Urkullu ha insistido en que, en los próximos meses, «se pueden producir rebrotes en los contagios» porque «estamos en incertidumbres». «A las instituciones nos corresponde articular una respuesta sanitaria eficiente que asegure la detección rápida de nuevas infecciones y el aislamiento de todos los casos y sus contactos. Pero eso no es suficiente, debemos mantener el compromiso individual y colectivo, mantener para no echar por tierra todo el camino recorrido», ha subrayado.
En este sentido, ha emplazado a seguir los hábitos de limpieza, higiene y desinfección recomendados; a que haya agrupaciones restringidas y distanciamiento físico de dos metros, así como al uso de mascarillas en relaciones de cercanía y espacios cerrados. «Con estos hábitos, cada persona establece un cordón de seguridad frente a los rebrotes», ha aseverado.
Por ello, ha realizado un llamamiento a cumplirlos, compartirlos y difundirlos. «Nos ayudan a conquistar parcelas de nueva normalidad, asumiendo una cultura de la prevención y la autoprotección responsable», ha señalado.
DEUDA
Por otra parte, ha aludido al recurso de la deuda para hacer frente a la crisis económica, para recordar en 2013 contaban con 1.100 millones menos de ingresos que en el año anterior.
El Lehendakari ha añadido que ha sido «todo un trabajo de casi ocho años» para llegar a una situación que permite a Euskadi endeudarse en 855 millones y ha apuntado que ya se ha cumplido con la capacidad de endeudamiento prevista para este año.
Por otra parte, ante las acusaciones de falta de autocrítica, se ha preguntado si podrían haber dimensionado en febrero de otra manera el calibre de la pandemia o de sus consecuencias, y ha destacado que estuvieron entre los primeros en adoptar decisones.
«Hasta el 11 de marzo, la OMS no reconoció la pandemia y fuimos de los primeros en adoptar decisiones, especialmente el cierre de los centros escolares y la declaración de emergencia sanitaria», ha añadido.
Respecto a si algunas decisiones se podrían haber tomado con mayor antelación, especialmente, en la situación creada en el hospital de Txagorritxu, ha recordado que este jueves se conoció que había 15 vías de contagio por las que llegó el coronavirus al Estado español.
Iñigo Urkullu ha defendido que las decisiones adoptadas han evitado «situaciones de caos, de colapso», y se superó «la crisis de la capacidad de las UCIs con recursos propios sanitarios».
Por ello, ha señalado que han tenido capacidad de «tomar la iniciativa y corregir iniciativas confusas» que provocaba la situación, tanto en el entorno como en «entornos más próximos».