Unión de Uniones propone arranques de viñedos para reestructurar el sector vitivinícola

Bembibre y Toral de los Vados, León. Un decreto de la Junta de Castilla y León obliga a los agricultores propietarios de viñedos viejos pertenecientes a la DOP Bierzo, a regularizarlos mediante su inscripción en el registro vitícola o, en su defecto, arrancar las viñas que se mantienen sin registro administrativo. En la imagen, cepas con más de 60 años de antigüedad en las fincas de Dominio de Tares en Toral de los Vados, León, en la mañana del viernes 12 de abril

El arranque de viñedos es necesario para la reestructuración y reconversión del sector teniendo en cuenta las señales del mercado y así poder atajar los retos que supone el cambio climático en el sector vitivinícola, según asegura Unión de Uniones. Además, la organización apremia a incentivar la promoción de las pequeñas y medianas bodegas en países extranjeros tanto de dentro como de fuera del mercado comunitario.

Para Unión de Uniones, el sector necesita fondos extraordinarios y la reconsideración de los recursos asignados a la Intervención Sectorial Vitivinícola, tras el nuevo escenario definido por el informe de la Comisión para así recuperar las previsiones futuras del cultivo.

Desde la organización, consideran que «hay que actuar sobre los factores de oferta y demanda que están poniendo en riesgo uno de los sectores más icónicos y diversos» de la geografía española, y reclaman que no han recibido ayudas ni por la sequía ni por los daños provocados por la pandemia, así como otros sectores.

Otro de los problemas a los que se enfrentan los productores es el escaso relevo generacional, que Unión de Uniones achaca a la falta de rentabilidad del sector en los últimos años. Igualmente, la organización apuesta por aprovechar este momento de crisis para que la salida de quienes deseen abandonar el cultivo pueda significar el redimensionamiento de las tierras y permitir recuperar los márgenes de rentabilidad.