Una veintena de ONG piden el cese de las hostilidades y un alto el fuego en Yemen
Más de una veintena de ONG han hecho un llamamiento a las partes enfrentadas en Yemen a que cesen las hostilidades y acuerden un alto el fuego a nivel nacional que permita iniciar conversaciones de paz y acabar con un conflicto que ha provocado la peor crisis humanitaria mundial.
En un mensaje conjunto dirigido también a la comunidad internacional ante la celebración la próxima semana de la Asamblea General de la ONU, las ONG firmantes –entre las que figuran Oxfam, Save the Children o Acción contra el Hambre (ACH)– han advertido de que «solo una solución política puede poner fin a la guerra y restaurar la paz en Yemen» además de respaldar «soluciones duraderas ante la grave situación humanitaria».
«Todas las partes deben cesar inmediatamente las hostilidades, acordar un alto el fuego a nivel nacional, cooperar de buena fe con el enviado especial de la ONU para Yemen, Martin Griffiths, y ayudar a reiniciar un proceso de paz más amplio», han sostenido en su mensaje, firmado también por el Consejo Noruego para los Refugiados (NRC) o CARE.
«Tras casi cinco años de conflicto, y pese a todos los esfuerzos para frenar el desplazamiento, el hambre y la enfermedad, Yemen sigue siendo la peor crisis humanitaria en el mundo», han lamentado, advirtiendo de que la intensificación de los combates en algunas zonas del país amenaza con agravar la situación.
Además, «pone en peligro la seguridad de los civiles y amenaza los canales para los suministros críticos de combustible, alimentos y medicinas», han destacado las ONG, que recuerdan que «es crucial que sigan abiertos y plenamente operativos» puesto que millones de personas dependen de ellos «para su supervivencia».
Unos 17 millones de personas –más del 60 por ciento de la población– se enfrentan a inseguridad alimentaria, una cifra que se ha conseguido reducir en el último año gracias al incremento de la asistencia pero que podría aumentar si esta no se mantiene, han explicado.
Las ONG también han llamado la atención sobre el continuado deterioro de la economía del país y sobre las restricciones a las importaciones imperantes, así como los problemas que tienen millones de yemeníes a la hora de acceder a asistencia, en muchos de los casos por una excesiva carga burocrática que ralentiza la respuesta de la las agencias humanitarias.
Así las cosas, han pedido a la comunidad internacional que ejerza su presión sobre las partes enfrentadas –el Gobierno respaldado por la coalición que lidera Arabia Saudí y los rebeldes huthis apoyados por Irán– no solo para que accedan a un alto el fuego sino también para que «garanticen acceso comercial y humanitario de bienes esenciales y servicios de forma segura y si restricciones» al país.
También quieren que presionen a las partes para que «se impliquen de buena fe y sin condiciones previas en los esfuerzos para ampliar el proceso político más allá del Acuerdo de Estocolmo» auspiciado por la ONU y que principalmente permitió un alto el fuego en Hodeida, para convertirlo en «un proceso inclusivo que implique la participación significativa de mujeres, jóvenes, sociedad civil y otros grupos tradicionalmente marginados».