Una gran operación de seguridad deja al menos un centenar de bajas talibán en el norte de Afganistán
El Ministerio de Defensa de Afganistán ha informado este viernes de aproximadamente un centenar de bajas entre los talibán durante la gran operación combinada que las fuerzas de seguridad comenzaron el jueves en la provincia de Baghlan, en el norte del país, después de que los insurgentes se hicieran con el control a mediados de esta semana de la remota localidad de Burka, su primera conquista desde el inicio de la última fase de la retirada de las fuerzas internacionales.
El Ministerio ha informado también de un avance en las últimas horas de las fuerzas combinadas del Ejército, Policía y comandos especiales afganos, estos últimos incorporados la pasada noche a la operación en las poblaciones de Baghlan e Markazi, Dahana e Ghori, así como a las afueras de la capital de la provincia, Pul e Jumri.
En esta última ciudad precisamente se han desplegado los comandos afganos, que a partir de ahora se encargarán de coordinar las operaciones en el resto de la provincia, según ha informado el comandante de las fuerzas especiales Shafiulá Mohamadi a la cadena Tolo News.
«El enemigo ha registrado un centenar de bajas en los combates y estas bajas han aumentado desde la llegada, la pasada noche, de los comandos», ha indicado el responsable de las fuerzas especiales.
Ahora, las operaciones se están concentrando en las autopistas que conectan Baghlan con las vecinas provincias de Tajar y Kunduz, en el norte y el noreste de Afganistán, que llevan dos días cerradas por los combates.
Mientras, queda por esclarecer la situación en dos bases militares de Baghlan e Markazi, que presuntamente se habrían «rendido» ante los insurgentes, según fuentes oficiales locales y los propios talibán. Los diputados estiman que medio centenar de soldados se vieron obligados a retroceder tras la ofensiva, mientras que los talibán estiman en al menos 200 los militares que se han rendido. El Ministerio de Defensa ha desmentido, por su parte, cualquier tipo de rendición.
La ofensiva en Burka ha tenido lugar un día después de la muerte de al menos nueve miembros de las fuerzas de seguridad en un ataque de los talibán en Baghlan e Markazi, que se saldó con el secuestro de otros 16 agentes.
Baghlan ha sido durante años una de las provincias con mayor presencia de los talibán en el norte del país, si bien los insurgentes han incrementado sus operaciones durante las últimas semanas, a pesar de la existencia de conversaciones de paz con el Gobierno desde septiembre de 2020.
El grupo ha aumentado además sus operaciones en otras provincias del país durante los últimos días, coincidiendo con el inicio de la retirada de tropas internacionales a finales del mes pasado y que teóricamente culminará el 11 de septiembre.
