Un total de 81 empresas cántabras tienen plan de igualdad de 113 que deberían tenerlo

Trabajo edita una guía para facilitar e impulsar esta herramienta, que desde marzo será obligatoria en las 158 de más de 50 empleados

Un total de 81 empresas cántabras cuentan en la actualidad con un plan de igualdad de las 113 que por su tamaño -más de cien trabajadores- deberían tenerlo implantado ya.

Se trata de «una cifra que, aunque importante, constata la existencia de empresas que no están cumpliendo con su obligación», ha evidenciado este lunes la consejera de Empleo y Políticas Sociales, Ana Belén Álvarez.

Ha sido en una rueda de prensa en la que ha presentado la guía que su departamento ha elaborado, a través de la Dirección General de Trabajo, para impulsar y facilitar la implantación de planes de igualdad en las empresas de la región.

Según datos del directorio de empresas y establecimientos de la comunidad autónoma, del Instituto Cántabro de Estadística (ICANE), hay 113 empresas que deberían tener ya aprobado el suyo -obligación que cumplen 81- y a partir del próximo 7 de marzo, otras 158, pues entonces será un imperativo legal para las de más de 50 empleados.

«Los planes de igualdad no deben ser vistos como una obligación, sino como una oportunidad y una expresión de nuestro compromiso por alcanzar una sociedad más justa y cohesionada», ha manifestado en su comparecencia ante los medios, en la que ha estado acompañada por el director general de Trabajo.

La consejera ha señalado que esta guía refleja el «firme compromiso» de su departamento por promover la igualdad entre hombres y mujeres en el ámbito laboral, donde a pesar de que se ha avanzado mucho en los últimos años, todavía persisten brechas de género.

BRECHAS DE GÉNERO

En este sentido, se ha referido a las diferencias salariales. En Cantabria, según la Encuesta de Estructura Salarial del INE, la ganancia media de los hombres es de 25.250 euros frente a los 19.012 de las mujeres.

«Es decir, existe una diferencia entre géneros de 6.238 euros», ha remarcado la consejera, para quien «todavía persisten importantes desigualdades entre hombres y mujeres».

Estas últimas «siguen estando empleadas mayoritariamente en algunos de los sectores laborales peor retribuidos y están infrarrepresentadas en puestos de responsabilidad», ha diferenciado.

Y también ha aludido a la reducción del paro en los últimos doce meses, que ha sido 5,5 puntos superior en el caso de los hombres (-14%) que en el de las mujeres (-8,5%).

«La discriminación salarial, el mayor desempleo femenino, la todavía escasa presencia de las mujeres en puestos de responsabilidad política, social, cultural y económica, o los problemas de conciliación entre la vida personal, laboral y familiar muestran cómo la igualdad plena, efectiva, entre mujeres y hombres, es todavía hoy una tarea pendiente», ha recalcado.

GUÍA, PLANES Y AYUDAS

En cuanto a la guía, que consta de 33 páginas, ha explicado que es una herramienta a disposición de empresas y trabajadores que explica «de forma detallada, paso a paso, cómo se elabora plan» de igualdad.

Para su edición se ha tenido en cuenta las deficiencias que han observado los técnicos de la Dirección de Trabajo encargados del control de su legalidad y registro y que, básicamente, afectan a la constitución de las comisiones negociadoras y sobre el proceso de negociación en sí mismo, que debe quedar fehacientemente acreditado, sobre todo en la elaboración del diagnóstico.

La consejera ha animado a las empresas cántabras a que implanten, «tengan o no obligación», un Plan de Igualdad en su organización, porque «la participación equilibrada de mujeres y hombres en sus plantillas y en la toma de decisiones favorece un buen clima laboral, mejora la gestión y contribuye a mejorar los resultados económicos».

Ha recordado que, además de esta Guía, el Servicio Cántabro de Empleo (EMCAN) pone a disposición de las sociedades que voluntariamente quieran implantar el plan 224.000 euros, con «una ayuda de hasta 6.000 euros por empresa».

El plan de igualdad es un conjunto ordenado de medidas tendentes a alcanzar la igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres y a eliminar la discriminación por razón de sexo.

Entre otros aspectos, la guía explica qué empresas tienen la obligación de adoptar medidas de igualdad, los planes de igualdad voluntarios y los obligatorios, las normas que regulan la comisión negociadora y el proceso de negociación: constitución, representatividad, participación, cuánto debe durar el proceso, quien tiene que negociar, etc.

También hay un apartado específico con recomendaciones sobe la elaboración de los planes de igualdad, qué contenido mínimo deben tener, cuándo se deben revisar y cómo hay que registrarlos, además del régimen sancionador en caso de incumplimiento de las normas y un apartado específico dedicado a la igualdad retributiva entre hombres y mujeres.

ACTUACIONES EN 2022

Junto a esta Guía y las ayudas del EMCAN, en la línea de seguir trabajando en la promoción y registro de planes, desde la Dirección General de Trabajo se van a desarrollar dos nuevas líneas de actuación en 2022.

Por un lado, con la Fundación para las Relaciones Laborales (ORECLA) se va a apoyar y reforzar el trabajo de las comisiones negociadoras dentro de las competencias de este organismo sobre mediación y negociación colectiva, poniendo a su disposición los recursos del ORECLA para favorecer el acuerdo.

La segunda línea de actuación será con el Consejo de Relaciones Laborales de Cantabria, desde el que Trabajo va a poner en marcha el Aula de Relaciones Laborales gracias a un convenio con la Universidad de Educación a Distancia (UNED) de Cantabria.

A través de este Aula, se elaborará un estudio sobre la situación de los Planes de Igualdad en Cantabria a 7 de marzo de 2022 que nos permita un diagnóstico real de la situación que contemple diversos aspectos.