Un estudio muestra que los murciélagos y los coronavirus han evolucionado juntos durante millones de años
Un estudio llevado a cabo por investigadores estadounidenses ha evidenciado que los murciélagos y los coronavirus han evolucionado junto durante millones de años, dado que diferentes especies de este animal tienen sus propias cepas del virus.
«Descubrimos que existe una profunda historia evolutiva entre los murciélagos y los coronavirus. Desarrollar una mejor comprensión de cómo evolucionaron los coronavirus puede ayudarnos a construir programas de salud pública en el futuro», han dicho los investigadores, cuyo trabajo ha sido publicado en la revista Scientific Reports .
Los coronavirus transportados por los murciélagos estudiados en este documento son diferentes de los que están detrás del que provoca la enfermedad Covid-19, pero al aprender sobre los coronavirus en los murciélagos se podría, a juicio de los expertos, entender mejor el virus que está causando la pandemia a nivel mundial.
Todos los animales tienen virus que viven dentro de ellos y los murciélagos, así como una variedad de otros grupos de mamíferos, son portadores naturales de coronavirus, los cuales no parecen ser dañinos para los murciélagos, pero existe la posibilidad de que sean peligrosos para otros animales.
Este estudio ha examinado las relaciones genéticas entre diferentes cepas de coronavirus y los animales en los que viven, lo que prepara el escenario para una mejor comprensión de la transferencia de virus de animales a humanos.
«Esta es una estimación muy aproximada de la proporción de murciélagos infectados. Cada vez hay más evidencia de variación estacional en la circulación de estos virus en los murciélagos, lo que sugiere que este número puede variar significativamente según la época del año», han dicho los expertos.
Los investigadores realizaron análisis genéticos de los coronavirus presentes en estos murciélago y, al comparar los coronavirus aislados y secuenciados en el contexto de este estudio con los de otros animales, incluidos delfines, alpacas y humanos, pudieron construir un árbol genealógico gigante de coronavirus, el cual cómo los diferentes tipos de coronavirus están relacionados entre sí.
«Descubrimos que, en su mayor parte, cada uno de los diferentes géneros de familias de murciélagos para los que había secuencias de coronavirus disponibles tenía sus propias cepas. Además, en base a la historia evolutiva de los diferentes grupos de murciélagos, está claro que existe una profunda coexistencia entre los murciélagos (a nivel de género y familia) y sus coronavirus asociados», han explicado los investigadores.
Por ejemplo, los murciélagos frutales de la familia Pteropodidae de diferentes continentes e islas formaron un grupo en su árbol y fueron genéticamente diferentes a las cepas de coronavirus de otros grupos de murciélagos que se encuentran en las mismas zonas geográficas.
En este sentido, los expertos han observado que, en casos excepcionales, los murciélagos de diferentes familias, géneros y especies que viven en las mismas cuevas y que tienen espacios muy cercanos en el gallinero compartían la misma cepa de coronavirus.