Un estudio español avala la recuperación temprana tras cirugía de prótesis de cadera y rodilla
Profesionales del Hospital Universitario Infanta Leonor (Madrid) coordinan, con apoyo del Grupo Español de Rehabilitación Multimodal (RedGERM), un estudio multicéntrico observacional que asocia la aplicación de protocolos de recuperación temprana o intensificada a un menor número de complicaciones en pacientes intervenidos de prótesis total de cadera y rodilla.
Esta investigación, en la que han participado 131 hospitales españoles y más de 6.100 pacientes, concluye que el tratamiento de la anemia antes de la intervención, el uso de anestesia regional, la administración durante la intervención de ácido tranexámico (fármaco que reduce el sangrado) y que el paciente se levante de la cama y empiece a andar pronto tras la cirugía son clave para que el enfermo vuelva al estado previo a la cirugía en el menor tiempo posible.
Para la realización del estudio, publicado en la revista Journal of the American Medical Association Surgery , fueron reclutados un total de 6.146 pacientes intervenidos de prótesis total de cadera o rodilla durante dos meses (de octubre a diciembre de 2018) tanto en hospitales con este protocolo como en otros que carecen de ellos. El seguimiento de los pacientes para evaluar la presencia de complicaciones fue de 30 días postoperatorios. No se hallaron diferencias en cuanto a las complicaciones entre los pacientes tratados en hospitales con o sin este protocolo, pero sí en estancia hospitalaria.
La muestra completa de todos los pacientes (independientemente de su adscripción a este protocolo) fue dividida en cuartiles de cumplimiento, encontrándose un menor número de complicaciones totales y moderadas graves en el grupo de mayor cumplimiento en comparación con el de menor cumplimiento. Asimismo, la estancia hospitalaria resultó ser menor en el grupo de mayor cumplimiento (4 frente a 5 días) comparando los grupos de menor y mayor cumplimiento.
Los componentes del protocolo asociados a una disminución de las complicaciones fueron la anestesia regional, movilización precoz, un valor elevado de hemoglobina preoperatorio y la administración intraoperatoria de ácido tranexámico.
Los protocolos de recuperación temprana o intensificada, también conocidos como ERAS, consisten en la implantación de unas medidas basadas en la evidencia científica a lo largo de todo el periodo perioperatorio para disminuir el estrés quirúrgico al que se ve sometido el paciente y mantenerle en un estado fisiológico adecuado, de forma que vuelva al estado previo a la cirugía en el menor tiempo posible y se disminuyan las complicaciones postoperatorias.
Los beneficios de aplicar protocolos ERAS acumulan evidencia científica en algunas cirugías, como la colorrectal, donde empezaron a aplicarse. Sin embargo, en cirugía ortopédica y traumatológica, la evidencia es limitada en cuanto al impacto que tienen los elementos individuales de los protocolos en las complicaciones y en la estancia hospitalaria.