UGT y PSE-EE rinden homenaje a Nicolás Redondo, «luchador eterno» en la defensa de los derechos de los trabajadores

Pepe Álvarez, presente en el acto, pide que se abra una «etapa de reconocimiento» a su figura y se «visibilice en las calles» de Euskadi

BILBAO, 16

UGT-Euskadi y PSE-EE han homenajeado a quien fuera ex secretario general de la UGT y exdiputado socialista Nicolás Redondo, fallecido el pasado 3 de enero, de quien han destacado que fue un «luchador eterno» en la defensa de los derechos de los trabajadores.

Ambas entidades han recordado así la trayectoria y legado del dirigente sindical en Portugalete (Bizkaia), municipio en el que residió, en una jornada en la que hubiera cumplido 96 años. La cita ha contado con la participación de Mikel Torres, alcalde del municipio y secretario general del PSE de Bizkaia; la vicelehendakari y consejera de Trabajo, Idoia Mendia; el secretario general del PSE, Eneko Andueza; los secretarios generales de UGT y UGT Euskadi, Pepe Álvarez y Raúl Arza, respectivamente, así como de su hijo, Nicolás Redondo Terreros.

Hasta Portugalete se han acercado, también, el presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, el secretario de Justicia, Tontxu Rodríguez, y la secretaria general de CCOO Euskadi, Loli García, entre otros.

En su intervención, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha calificado a Redondo Urbieta de «personaje universal» que pese a ser «un vasco, profundamente vasco, era, sobre todo, un internacionalista». Por ello, ha reclamado que se abra una «etapa de reconocimiento» de su figura y se «visibilice en las calles» de Euskadi.

«Hay que hacerle ese reconocimiento. Su figura va más allá de las fronteras de la UGT y del PSOE», ha argumentado al respecto de «uno de los líderes más importantes que ha tenido este país».

A su entender, Redondo representó «los valores de innovación» del sindicalismo y, tras recordar el «hito» que supuso la huelga general de diciembre de 1998, ha ensalzado el «proceso de concertación» al que dio inicio. «El camino de relaciones que Redondo inició con la CEOE y que hoy se conoce como la concertación social», ha concretado.

En este contexto, ha considerado que los «frutos» obtenidos para los trabajadores, «gracias al proceso de concertación de los últimos cinco años», proceden de «la política que desde la UGT impulsó» Nicolás Redondo: «Concertar, acordar, dialogar».

Del mismo modo, ha subrayado que el histórico dirigente «mostró cómo se practica la autonomía sindical», aunque ello le llevase a «romper con amigos, con una parte de su historia».

Por su parte, el secretario general de UGT Euskadi, Raúl Arza, ha advertido que sin la figura del homenajeado «la historia de la UGT y del Socialismo no sería la misma». Tras defender que Redondo Urbieta fue un «luchador eterno» en la defensa de los trabajadores, ha afirmado que representó a «toda una generación de vascos que supieron enfrentarse al Franquismo».

«Somos muchos los que le consideramos nuestro padre sindical. Un luchador eterno al que debemos muchos de los derechos laborales que tenemos… Un referente en la defensa de los valores democráticos, de la libertad y del sindicalismo. Su memoria nos impulsa a continuar su lucha. Gracias por tu coherencia sindical y política porque supiste adaptarte sin traicionar a tus ideales», ha finalizado.

En representación del Gobierno Vasco ha intervenido la vicelehendari segunda, Idoia Mendia, quien ha defendido que la democracia «no se construyó ni se desplegó desde despachos, sino desde el activismo en las fábricas y las calles». «Y ahí siempre estuvo la voz de Nicolás Redondo, que nunca calló ante la injusticia ni el sufrimiento», ha expresado.

Mendia, que ha valorado su «figura indispensable para la conquista de derechos y libertades», ha incidido en que Redondo Urbieta «nunca bajó los brazos ni se puso de perfil, y lo hizo con la altura de miras de los grandes líderes, la que permite ver la posibilidad de acuerdos para mejorar la vida de la gente».

Asimismo, ha sostenido que la democracia es una tarea «inacabada» que tiene que ver con «entender la pluralidad de un país y con saber gestionarla para que las decisiones que se adopten beneficien a la mayor parte de la ciudadanía».

PSE-EE

Por su parte, el secretario general del PSE, Eneko Andueza, ha puesto en valor el legado de Nicolás Redondo en el avance de derechos para la clase trabajadora y en la defensa de los derechos laborales. En este sentido, ha defendido la necesidad y la importancia de articular políticas a través de las instituciones para canalizar las demandas de la clase trabajadora.

«Los derechos laborales sólo están garantizados con un socialismo fuerte, a través del Partido Socialista y de la UGT. Nicolás Redondo entendió pronto que la lucha sindical y la lucha de la clase obrera era el mejor motor para la transformación de la sociedad, pero también que, sin un Partido Socialista fuerte, capaz de alcanzar el poder y llegar al Gobierno, esa lucha estaba condenada al fracaso», ha indicado.

Andueza, que ha alabado al histórico líder sindical colocándolo en «el olimpo socialista», ha remarcado su figura «clave» en la reconstrucción del PSOE y la UGT. «Nicolás fue, sobre todo, la persona que luchó por volver a situar a la Unión General de Trabajadores en el lugar que históricamente le correspondía», ha recalcado.

Según ha manifestado, los socialistas actuales no son más que los herederos de quienes les precedieron, «gestores de un patrimonio que tiene nombres y apellidos, que tiene protagonistas de carne y hueso». Del mismo modo, ha resaltado su contribución, junto a Marcelino Camacho, en la institucionalización del sindicalismo en España, así como su papel en la consecución de la negociación colectiva.

«Ha cambiado el país, ha cambiado la economía y han cambiado las formas y los fines de las reivindicaciones, pero no ha cambiado el motor de nuestra lucha, que no es otro que la lucha por la dignidad de la clase trabajadora. Y en esa lucha, Nicolás Redondo sigue siendo un referente al que acudir siempre», ha afirmado.

Por último, el alcalde del municipio, Mikel Torres, ha recordado que pese a nacer en Barakaldo, Nicolás Redondo vivió en Portugalete, lo que supone «un honor para la Villa».

Tras defender que fue «artífice del movimiento obrero de Bizkaia», ha destacado que su figura representa la «historia con mayúsculas de este país» y «una figura clave para entender la historia de la democracia en España». «Hablar de Nicolás Redondo es hablar de honradez, coherencia, lucha y valentía», ha concluido.

«AGRADECIMIENTO AL PNV»

El acto ha contado también con la intervención de Nicolás Redondo Terreros, secretario general del PSE-EE entre 1997 y 2002 e hijo del homenajeado, quien ha agradecido al PNV su presencia. Así, ha señalado que su padre «respetaba y quería» a históricos dirigentes jeltzales como Juan de Ajuriaguerra, Luis María Retolaza o Jesús María Leizaola.

En este contexto, ha subrayado la trayectoria de aquellos que fueron «capaces de morir por sus ideas, pero incapaces de matar por ellas» y que «lo pasaron mal personal, familiar y económicamente». «Todos fueron unos luchadores por la democracia y la libertad», ha insistido.

Por contra, ha censurado la actitud de aquellos «cuyos padres o abuelos no estuvieron a la altura de las circunstancias» y ahora se dedican a «revisar la historia y están continuamente pasando cuentas». «Nicolás Redondo nunca vivió la vida política como un refugio, sino como una pasión», ha detallado.

Además, ha defendido que su padre «siempre hizo lo que consideró» que debía hacer, aunque ello le acarrease una «soledad injusta». De este modo, ha valorado que renunciara a liderar el PSOE y se esforzara para que lo hiciera en su lugar Felipe González, «el mejor», aunque «luego la vida les llevara a ambos por caminos diferentes».