UGT pide revisar la Ley de Prevención para frenar una siniestralidad laboral mortal «camino de récord» en Cantabria
El responsable regional de Salud Laboral de UGT en Cantabria, Martín Calonge, ha reclamado este miércoles una revisión y actualización de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales «para hacerla útil y eficaz y frenar una siniestralidad laboral mortal que en Cantabria va camino de récord», y más, tras los tres últimos accidentes registrados esta semana, dos lunes y otro el martes, todos relacionados con vehículos.
En un comunicado, el sindicalista ha señalado que la Ley de Prevención de Riesgos Laborales de 1995 «ha supuesto significativos avances» pero «no ha logrado que la prevención de riesgos laborales se integre en la cultura empresarial, que forme parte del sistema de gestión propio de la empresa».
Con todo, ha subrayado que «de nada sirve una buena ley si no se respeta», por lo que ha considerado «obligado más cumplimiento, más vigilancia de la Administración y más sanciones para persuadir a los defraudadores».
En 2021 se registraron en centros de Cantabria 10 accidentes laborales mortales, más otros tres en el desplazamiento a ellos (in itinere). En lo que va de año, hasta septiembre, ya había 8 «sin contar los últimos que se han sufrido y con un último trimestre del año pendiente de registrar».
«Es inaceptable la situación actual, con 741 muertes en el trabajo en España el año pasado que, según las últimas estimaciones, podrían superar las 800 en 2022», ha denunciado el ugetista, que ha recalcado que desde 2014 la siniestralidad laboral «no ha dejado de crecer y en todos los conceptos tras la salida de la crisis económica de 2008 y el motivo principal es, simplemente, que no se cumple la normativa legal».
Calonge ha subrayado que la accidentalidad laboral está «desbocada» en Cantabria desde el año pasado por el incremento de accidentes leves asociado al impacto de la Covid-19 en el personal socio sanitario.
Este año se han registrado en los nueve primeros meses 36 accidentes graves, la cifra más alta de los últimos cinco años, y un número creciente de mortales, «que va camino de superar los 13 contabilizados en 2021, que ya fue la mayor cuantía de muertes en el trabajo desde el año 2010», ha concluido el sindicalista.