UGT no aprecia una senda inflacionista pero pide reforzar las rentas de las personas más vulnerables
UGT ha afirmado este miércoles que pese el repunte del IPC hasta el 1,3% en marzo, no se aprecia una «senda inflacionista» porque la tasa se encuentra por debajo del umbral máximo del 2% recomendado por el Banco Central Europeo (BCE).
No obstante, ha advertido del impacto que tiene para las personas con ingresos más reducidos el repunte de los precios de la electricidad y de los alimentos, máxime si se tiene en cuenta que 600.000 hogares no percibían ningún tipo de ingreso al cierre de 2020.
Por esta razón, el sindicato ha reclamado estímulos fiscales «bien dirigidos» y reforzar la política de rentas mediante la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) y el establecimiento de salarios mínimos de convenio de al menos 1.000 euros al mes.
También considera «absolutamente imprescindible» mejorar la prestación del Ingreso Mínimo Vital (IMV), pues todavía hay medio millón de personas con derecho a ella que han quedado excluidas del mismo.
En este sentido, UGT recuerda que ha iniciado una ronda de reuniones con diferentes grupos parlamentarios a fin de que estos recojan nuestras enmiendas para mejorar y enriquecer la regulación actual del IMV.
