Turquía confirma su responsabilidad en la muerte de una periodista kurda en Irak y la vincula con el PKK
El CPJ y la FIP pidieron a Ankara una investigación tras el bombardeo, ejecutado el viernes y que se saldó con la muerte de otra reportera
Las autoridades de Turquía han anunciado este miércoles la «neutralización» de una mujer identificada como integrante del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y que, según medios kurdos, era una de las dos periodistas muertas en un bombardeo ejecutado el viernes en la región semiautónoma del Kurdistán iraquí.
Los servicios de Inteligencia turcos han indicado que la fallecida es Gulistán Tara, quien se habría unido al PKK en 1998 y quien llevaba a cabo «actividades de propaganda y desinformación para la organización terrorista», según la agencia estatal turca de noticias, Anatolia.
Según las informaciones recogidas por la cadena de televisión kurda Rudaw, Tekik y Hero Bahadin, periodistas de la cadena de televisión Sterk TV, murieron el viernes en un ataque aéreo en los alrededores de Said Sadiq, una localidad situada cerca de la ciudad de Sulaimaniya.
El ataque fue criticado por políticos iraquíes y kurdos, así como por organizaciones de prensa, incluida la Federación Internacional de Periodistas (FIP), que el martes denunció la muerte de las dos periodistas y agregó que otro reportero identificado como Rebin Bekin había resultado herido.
La FIP destacó que las víctimas viajaban en un vehículo atacado por un supuesto dron del Ejército turco y recalcó que no es el primer incidente de este tipo en el Kurdistán iraquí, tras el bombardeo del 8 de julio contra otro coche que trasladaba a periodistas en Sinyar, suceso que se saldó con la muerte de un reportero y con otro herido.
Por ello, el organismo pidió a ambos países que lancen investigaciones sobre la muerte de las dos periodistas, mientras que el secretario general de la FIP, Anthony Bellanger, destacó que el suceso «refleja los peligros extremos a los que hacen frente los periodistas que trabajan en zonas de conflicto».
Además, hizo hincapié en que el incidente «subraya la necesidad urgente de medidas inmediatas para garantizar su seguridad y hacer que los responsables de estos crímenes rindan cuentas», según un comunicado publicado por el organismo a través de su página web.
Por su parte, el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) indicó que la citada cadena es parte de la Compañía de Producción Multimedia Chatr, que opera también la cadena Aryen TV. Ambos medios están financiados por el PKK, ilegalizado este mismo año por Irak y considerado por Turquía, Estados Unidos y la Unión Europea (UE) como un grupo terrorista.
«Estamos profundamente tristes por el trágico bombardeo de un dron el 23 de agosto que mató a dos periodistas e hirió a un tercero en el Kurdistán iraquí», dijo la coordinadora interina del CPJ para Oriente Próximo y Norte de África, Yeganeh Rezaian. «Las autoridades turcas deben investigar rápidamente este ataque y determinar si el equipo de reporteros fue atacado por su trabajo», apostilló.