Trabajo asegura que la subida del paro en febrero es «insignificante»
El secretario de Estado de Empleo y Economía Social, Joaquín Pérez Rey, ha asegurado este jueves, durante la rueda de prensa de presentación de los datos de paro, que la subida del desempleo de 2.618 personas en febrero es «insignificante» y «muy por debajo de la media».
«Es muy buen dato en un contexto de menor crecimiento», ha expuesto el secretario de Estado, que ha recordado que febrero es «un mes que por definición marca el camino a la estabilidad positiva» en el mercado de trabajo español.
Tras el repunte de febrero, el número total de parados se situó en 2.911.015 desempleados, su menor cifra en un mes de febrero desde 2008, según ha destacado Trabajo.
Pérez Rey también ha precisado que esos 2.618 nuevos parados no se corresponden con pérdidas de empleo sino con la «incorporación de jóvenes y mujeres a las oficinas de los servicios públicos de empleo», como parte del colectivo sin empleo anterior.
El paro bajó en febrero en el sector servicios, con 3.868 desempleados menos (-0,19%); en la industria, donde disminuyó en 2.399 personas (-1%), y en la construcción, que restó 2.392 parados (-1,07%). Sin embargo, estos descensos no pudieron compensar los aumentos del desempleo en la agricultura (+1.138 parados, +1%) y, sobre todo, en el colectivo sin empleo anterior, donde subió en 10.139 personas (+4,1%).
«Se reduce en tres de cuatro sectores de actividad», ha precisado el secretario de Estado al exponer esos datos. El paro se incrementó en febrero entre las mujeres y bajó entre los hombres. En concreto, el desempleo femenino aumentó en 4.135 mujeres (+0,2%), frente a un retroceso del paro masculino de 1.517 varones (-0,1%). Así, al finalizar febrero, el total de mujeres desempleadas ascendió a 1.744.220 personas, mientras que el número de hombres en paro totalizó 1.166.795 desempleados.
Por edades, el paro entre los jóvenes menores de 25 años subió un 11,8% en febrero, con 11.862 parados más que a cierre de enero, mientras que el paro de las personas con 25 años y más bajó en 9.244 desempleados (-0,3%).
Pérez Rey ha destacado «la capacidad del mercado de trabajo español» tras los «cambios estructurales» acometidos por la reforma laboral. Uno de los objetivos de esa reforma era reducir la temporalidad. Así, en febrero se registraron 1.084.802 contratos, un 24,9% menos que en el mismo mes de 2022. De todos ellos, 493.200 fueron contratos indefinidos, cifra que supera en un 55,6% a la de febrero de 2022.
En total, el 45,46% de los contratos realizados en febrero fueron indefinidos, porcentaje que supera el registrado en enero, cuando la proporción de contratos fijos fue del 44,16%.
Del total de contratos indefinidos suscritos en febrero, 230.635 han sido a tiempo completo, un 32,6% más que en igual mes del año pasado; 141.305 eran contratos fijos-discontinuos, multiplicando por casi tres la cifra de un año antes (+196,9%), y 121.260 eran contratos indefinidos a tiempo parcial (+27,2%).
«La contratación sigue la secuencia inaugurada por la reforma laboral, reduciendo de manera drástica las contrataciones temporales», ha añadido.
«NIVELES DESCONOCIDOS» DE AFILIACIÓN
En la misma rueda de prensa, el secretario de Estado de Seguridad Social y Pensiones, Borja Suárez, ha presentado los datos de afiliación, con 88.918 cotizantes más en febrero, su mayor alza en este mes desde 2015.
«Estamos en unos niveles desconocidos y estamos constatando una capacidad sorprendente de nuestro mercado de trabajo de seguir avanzando», ha añadido Suárez. El secretario de Estado también ha recalcado la «subida significativa» en la afiliación de las mujeres.
Los datos publicados este jueves por la cartera dirigida por José Luis Escrivá muestran que la subida mensual de afiliados medios en febrero se notó en ambos sexos, aunque algo más entre los varones, que ganaron en el mes 45.206 cotizantes respecto a enero (+0,4%), frente a un avance del empleo femenino de 43.713 ocupadas (+0,4%).
De este modo, la cifra de mujeres trabajadoras se situó a cierre de febrero en 9.486.570 afiliadas, mientras que el número de varones ocupados finalizó el segundo mes del año en 10.683.573 cotizantes.
«La afiliación se está comportando de manera extraordinariamente positiva (…). Los cambios que se han producido en el mercado de trabajo, durante la pandemia, la renovación del marco legislativo… Todo esto permite constatar la consolidación de un mercado de trabajo que responde a dinámicas y lógicas distintas», ha indicado el secretario de Estado de Seguridad Social y Pensiones.
Suárez también se ha detenido en la afiliación por comunidades autónomas, ya que todas ganaron afiliados medios en febrero. Los mayores ascensos, en términos absolutos, se registraron en Cataluña (+25.603 ocupados), Baleares (+11.792), Madrid (+11.690), Comunidad Valenciana (+7.836) y Andalucía (+7.042 cotizantes).
Para el secretario de Estado, esto refleja «un crecimiento sano» que, además, «preserva la cohesión territorial». También ha destacado que la afiliación se esté dando en «actividades de alto valor añadido», con empleo de calidad.
Suárez ha incidido también en los avances hacia la reducción de la temporalidad. El porcentaje de afiliados con contrato temporal retrocedió en febrero hasta un mínimo histórico del 14%, frente a la media del 30% de antes de la reforma laboral. En el caso de los menores de 30 años, la temporalidad se ha reducido 30 puntos, desde el 53% al 22%.
Al mismo tiempo, la Seguridad Social contabiliza ahora 2,5 millones de afiliados más con contrato indefinido que en diciembre de 2021, el último mes antes de la entrada en vigor de la reforma laboral.
Estas cifras, ha dicho Suárez, eran «inimaginables hasta hace muy poco» y relaciona la mejora con «la aprobación de la reforma laboral», que ha permitido «reducir la temporalidad de forma drástica y de forma contundente».
El secretario de Estado también ha recordado que los datos de afiliación aportan «certidumbre» y «confianza» a las empresas, ya que reflejan «la capacidad del mercado de trabajo de seguir avanzando», a la vez que ofrece a los trabajadores la posibilidad de «incorporarse al mercado de trabajo de manera mucho más estable».