Torra dice que el intento de aprobar las leyes de desconexión por lectura única lo forzaron «los del 155»
BARCELONA, 19
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha explicado que los partidos defensores de la aplicación del artículo 155 de la Constitución en 2017 fueron los que «forzaron» que los grupos independentistas intentaran aprobar por vía de urgencia y modificando el orden del día en el mismo pleno del 6 y 7 se septiembre del año pasado.
En su intervención en el debate monográfico sobre los plenos del 6 y 7 de septiembre de 2017, ha criticado el intento por parte de «los del 155» de impedir la aprobación de estas leyes por la vía judicial.
En concreto ha reprochado a los partidos constitucionalistas el «abuso del TC reforzado por la reforma del PP que supuso una ruptura de la inviolabilidad parlamentaria, y de la base del parlamentarismo».
«Un poco de responsabilidad señores del 155», ha dicho, y ha afirmado que fueron ellos los que impidieron la vía con la que pretendían aprobar las leyes de desconexión –una reforma del reglamento– que frenó el TC a petición del Gobierno liderado entonces por el PP.
Ha criticado la judicialización de la política que considera que ha llevado a cabo el Ejecutivo central desde 2017 y ha planteado: «Si la unidad de España necesita de hacer uso de la represión y violencia, puede que sea porque no tiene legitimidad en Cataluña».
Ha subrayado que ningún miembro del Govern ni de los grupos independentistas en el Parlament utilizarán «nunca la violencia» para hacer valer su proyecto político y que defenderán siempre la democracia.
El presidente se ha apoyado en los datos del Centre d Estudis d Opinió (Ceo) para asegurar que los ciudadanos vivieron «con indiferencia» los plenos sobre los que Cs –que ha impulsado el debate monográfico– quiere focalizar la vulneración de derechos que atribuye al independentismo.
Torra ha asegurado que «el relato que inventan ha fracasado y que la ciudadanía ha entendido que el debate fue legítimo y democrático», y ha asegurado que, por permitirlo, la expresidenta del Parlament Carme Forcadell está en prisión desde hace más de 300 días.
«Lo visten como un golpe a la democracia. Saben que las palabras pueden manipular la realidad, pero la realidad es tozuda y lo catalanes también. La realidad es que un Estado de la UE tiene presos políticos y exiliados», ha advertido.