Telefónica negocia vender parte de su red de fibra en Perú en pleno rebote de Hispam
La filial que engloba los negocios no estratégicos en Latinoamérica del grupo creció por primera vez en quince trimestres en ingresos y Ebitda
Tras cerrar ventas parciales de su negocio de fibra en Brasil, Chile y Colombia, Telefónica trabaja ahora en una operación similar en Perú, uno de los mercados de Telefónica Hispam, que, tras un proceso de reestructuración, ha empezado a reportar crecimiento orgánico de ingresos y oibda.
Laura Abasolo, presidenta de Hispam y directora financiera del grupo, anunció la operación durante la conferencia de analistas de finales de julio y subrayó que Telefónica busca «modular su exposición a la región», pero dejó claro que la compañía no malvenderá sus empresas en Argentina, Chile, Colombia, México, Perú, Venezuela y Uruguay.
Asimismo, subrayó el «sólido desempeño» de los últimos meses y vaticinó una mejora a medida que la pandemia remitiera en el continente.
EL 19% DE LOS INGRESOS DEL GRUPO
Telefónica Hispam supuso el 19% de los ingresos del grupo y un 11% de su beneficio bruto antes de amortizaciones (Oibda). En concreto, la compañía facturó 3.945 millones de euros en estos mercados, un 4,2% más en términos orgánicos, y tuvo un Oibda de 769 millones hasta junio, un 0,6% menos después de crecer en el segundo trimestre.
Se trata de la primera vez en quince trimestres que Hispam crece en ingresos y Oibda en términos orgánicos, según Abasolo.
El crecimiento de la facturación se atribuye principalmente al crecimiento de los ingresos por venta de terminales, a la mejoría de los ingresos del servicio B2C y al crecimiento de los ingresos fijos de banda ancha y nuevos servicios y de televisión.
La compañía invirtió 501 millones de euros en Capex hasta junio, un 4,5% menos en términos orgánicos.
Por mercados, Chile y Colombia fueron los que reportaron hasta junio mayor Oibda (260 y 192 millones de euros, respectivamente), mientras que Argentina registró la mayor cifra de negocio con 870 millones de euros.
LAS CIFRAS DE CLIENTES
En total, la compañía tiene en estos mercados no estratégicos 109,5 millones de accesos, un 3,8% más que en junio de 2020 y presenta crecimientos de doble dígito en sus clientes de fibra óptica y de Internet de las cosas.
Entre ellos, destacan los accesos móviles que suman 93,4 millones de clientes, un 5,1% más que en junio de 2021 gracias a los crecimientos en clientes con contrato en Chile (24,7%), Colombia (15%) y Perú (6,4%), que compensaron la caída del 1,1% en Uruguay y del 8,3% en Venezuela.
Por su parte, el prepago creció en términos orgánicos un 3,4%, aunque cedió más de un millón de líneas entre Chile (687.000) y México (347.000). Estas pérdidas fueron compensadas con ganancias de 542.000 líneas en Colombia, 487.000 en Perú, 269.000 en Argentina y 168.000 en Ecuador.
Asimismo, el negocio fijo cedió un 9,3% interanual en el primer semestre hasta los 7,5 millones de accesos, 346.000 menos, debido a la erosión del negocio fijo tradicional, si bien su traducción en ingresos se vio compensada con el crecimiento de la fibra óptica y el crecimiento de los accesos sobre banda ancha fija.
PERSPECTIVA Y RIESGOS
En su informe financiero semestral, Telefónica resalta la agresividad de las ofertas en mercados como Chile, Colombia y Perú, un aspecto que señalan que podría «afectar a la posición competitiva y la eficiencia de las operaciones de Telefónica».
Asimismo, la compañía también subraya la inestabilidad política de estos tres mercados y el posible efecto que tendrá el deterioro de la situación fiscal por el coronavirus.
«En términos políticos existe riesgo de que con la llegada del nuevo gobierno en Perú y en Chile derivado del proceso constituyente, puedan producirse cambios en el marco regulatorio-normativo que afecten al medio plazo», subrayan.
Pese a estas predicciones, Telefónica muestra su esperanza de crecer a un 2,7% anual en Perú en el futuro próximo en su informe ante la bolsa de Lima.
En el caso de Argentina, la empresa subraya que la rentabilidad se ve amenazada ante el empeoramiento de la inflación y las «medidas insostenibles de contención de precios».
No obstante, el gran escollo de Telefónica en la región ha sido la situación monetaria, marcada por la hiperinflación de Argentina y Venezuela, que tiene impactos millonarios en las cuentas del grupo, y la caída de las monedas latinoamericanas durante la pandemia.
Los tipos de cambio han supuesto para el grupo (incluyendo Hispam, Reino Unido y Brasil) 959 millones de euros en ingresos y 356 millones de euros en el resultado operativo, si bien el impacto ha sido mucho menor en el segundo trimestre que en el primero.
En el caso de Hispam, esto se redujo en un impacto en la evolución de los ingresos de 5,3 puntos porcentuales y la variación reportada de las compañías en países con hiperinflación, que tuvo un impacto negativo de 2,4 puntos porcentuales.
Como medidas para mitigar este impacto, Telefónica está apostando, entre otros, por las emisiones de deuda en monedas locales, así como la generación de mayores eficiencias.