TAP obtiene sus primeros resultados positivos en un semestre desde 2019 con 22,9 millones de beneficios

TAP Air Portugal ha obtenido un beneficio neto de 22,9 millones de euros en el primer semestre de 2023, siendo la primera vez que la compañía registra resultados positivos en los seis primeros meses de un año desde 2019 y abandonando los números rojos que registró un año antes, cuando se anotó pérdidas de 202,1 millones de euros.

Desde la compañía destacan que este incremento se basa en el fuerte crecimiento de los ingresos de explotación, que han ascendido a 1.900 millones de euros, un 44,3% más en comparación con el mismo periodo de 2022. Este crecimiento es producto «del enfoque adoptado por TAP para capitalizar las oportunidades del mercado».

La aerolínea registró un beneficio bruto de explotación (Ebitda) recurrente de 361,7 millones de euros, con un margen del 19%. El beneficio operativo fue de en 124,5 millones de euros, con un margen del 6,5%.

En este semestre, la aerolínea ha reembolsado Bonos 2019-2023 por valor de 200 millones de euros, pero mantiene una liquidez de 899,7 millones de euros. El ratio Deuda Neta / EBITDA ha mejorado en el primer semestre de 2023, alcanzando un nivel de 2,5x, una mejora notable respecto al ratio de 3,5x registrado a finales de 2022.

El consejero delegado de TAP, Luis Rodrigues, considera que los resultados semestrales presentados confirman la tendencia de mejora comercial y financiera de TAP, «logrando un excelente desempeño» con un resultado neto positivo en el primer semestre y espera que el segundo semestre sea «intenso» pero asegura que TAP está preparada para ello.

En cuanto a los datos operativos de tráfico, en el primer semestre de 2023 TAP ha transportado un total de 7,6 millones de pasajeros, suponiendo ello un incremento del 30,2% respecto al año anterior. Durante este período, el número total de vuelos operados también ha aumentado un 17,9%, alcanzando el 89% de los niveles anteriores a la crisis.

La capacidad ha llegado a superar los niveles previos a la crisis, alcanzando el 104%, lo que representa un aumento del 21,4% en comparación con el primer semestre de 2022. El factor de carga aumentó 5,5 puntos porcentuales interanual hasta el 80,2%, mejorando también 0,5 puntos porcentuales en comparación con el primer semestre de 2019.

Los ingresos de explotación ascendieron a 1.906,3 millones de euros, lo que representa un aumento del 44,3% en comparación con el año anterior y un aumento del 31,6% en comparación con la primera mitad de 2019. Los costes de explotación recurrentes se incrementaron un 35% hasta los 1.781,8 millones de euros.