Sumar exige garantizar a las CCAA un suelo mínimo de ingresos y que la financiación no sea una «guerra de territorios»
El portavoz de Sumar en el Congreso, Iñigo Errejón, considera que el sistema de financiación autonómica debe garantizar un suelo mínimo de ingresos para las comunidades autónomas y no convertirse en una «guerra de juego de suma cero entre territorios».
Así lo ha defendido durante la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces al ser preguntado por el acuerdo de financiación singular para Cataluña acordado entre PSC y ERC. «Se tiene que acabar que las comunidades que son más ricas, por ejemplo por ser capital, se dediquen a hacerle dumping fiscal y competencia desleal al resto de comunidades autónomas», ha reclamado.
Desde Sumar defienden que hay que aprovechar el acuerdo de los socialistas para «poner en marcha» un nuevo sistema de financiación autonómica que sea «suficiente» y que acabe con el sistema actual que está «caducado». Eso pasa, entre otras cosas, por «saldar la deuda histórica con los territorios infrafinanciados» y por permitir a las Comunidades Autónomas «tener capacidad de recaudar más».
«No tendría sentido que las comunidades autónomas presten el grueso de los servicios de nuestro Estado del Bienestar y sin embargo, no tengan la suficiente capacidad de recaudación para ello», ha incidido. Errejón ha abogado por «garantizar» la compatibilidad de los principios de «ordinalidad» y de «solidaridad interterritorial» y eso pasa, según ha dicho, por un sistema «federal».
«HIPOCRESÍA» DEL PP
También el diputado de Sumar y En Comú Gerardo Pisarello ha situado el acuerdo de PSC y ERC como una «gran oportunidad» para mejorar la financiación de «todo el Estado». Aunque en su caso ha aprovechado la rueda de prensa desde el Congreso para censurar la «hipocresía» y el «doble discurso» del PP en esta materia.
Considera que el líder popular y expresidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, «sabe lo que es estar infrafinanciados» pero elige ponerse del lado de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso tachando el acuerdo de «cupo separatista».