Suecia investigará si hay subidas de precios injustificadas
El Gobierno de Suecia quiere conocer si en algunos sectores se han producido subidas de precios más allá de lo justificable por la evolución de los costes de las empresas, para lo que ha encomendado una investigación al Instituto de Coyuntura Económica (KI).
«El Gobierno encarga al KI que analice cómo han aumentado los precios en diversas industrias en relación con los costes», ha anunciado el Ministerio de Finanzas de Suecia, subrayando que debe investigar en particular «si los precios han cambiado más de lo que puede justificarse por el aumento de los costes de las empresas».
En este sentido, el Ministerio de Finanzas de la mayor economía escandinava ha destacado que, si bien el nivel de precios en Suecia aumentó a un ritmo rápido durante 2022, los costes laborales de las empresas solo aumentaron de forma moderada.
Asimismo, ha indicado que, según la encuesta mensual de coyuntura elaborada por el KI, las empresas suecas han informado hasta ahora de que su rentabilidad es buena en relación con el promedio de los últimos 20 años.
De este modo, será el propio KI el que determinará por sí mismo qué sectores serán cubiertos por el análisis con vistas a presentar las conclusiones de su investigación a más tardar el 5 de diciembre de 2022.
«Es muy importante que las empresas no se aprovechen de esta situación de alta inflación para aumentar sus precios más de lo justificado», ha advertido el ministro sueco de Finanzas, Mikael Damberg.
«Se corre el riesgo de aumentar aún más la inflación, lo que afecta a los hogares suecos, especialmente a aquellos que ya tienen márgenes pequeños. Seguiremos esto muy de cerca», ha añadido.
En su última reunión, celebrada a finales de junio, el consejo ejecutivo del Riksbank, el banco central de Suecia, decidió elevar en 50 puntos básicos el tipo de interés de referencia usado en sus operaciones de refinanciación, hasta el 0,75%, acelerando la estrategia de normalización de la política monetaria de la institución, que adelantó que la tasa rondará el 2% a principios de 2023.
En su análisis, el consejo del banco central más antiguo del mundo, puesto que sus orígenes se remontan a 1668, advirtió entonces de que la inflación ha seguido aumentando rápidamente y las subidas de precios se están extendiendo a toda la economía.