S&P ratifica el investment grade de Merlin pese a la crisis y el cierre de centros comerciales

Confía en que lo compensará con su cartera de oficinas y naves logísticas

Standard & Poors ha ratificado la nota BBB de investment grade que tiene otorgada a Merlin Properties, e incluso la situado es perspectiva positiva , desde la de estable en la que la mantenía hasta el momento.

La agencia de rating estima que la compañía que dirige Ismael Clemente podrá compensar el impacto que la crisis sanitaria y el estado de alarma en el país puede generar en su cartera de centros comerciales con el arrendamiento de sus edificios de oficinas y naves logísticas, activos que mantienen su ocupación y actividad y que generan el 75% del total de las rentas totales de la empresa.

«Nuestra decisión demuestra nuestra confianza en que la diversificada cartera de activos de Merlin le permita generar ingresos por rentas de forma sostenida y mitigar así el potencial efecto de la crisis en sus activos comerciales», indica S&P sobre la mayor socimi cotizada del país.

La firma confía además en que Merlin mantenga sus principales ratios financieros y de liquidez en los parámetros adecuados a la nota que le tiene otorgada.

IMPACTO ACOTADO DE LA CRISIS.

Merlin informó recientemente al mercado de su estimación de que la actual crisis desatada por la pandemia de coronavirus le supondrá perder alrededor del 10% de las rentas brutas que anualmente cobra por el alquiler de sus activos.

La compañía realizó esta estimación teniendo en cuenta las medidas de «bonificaciones de la renta» que está implementando para los inquilinos de sus locales y espacios que no pueden abrir el público y bajo la premisa de que el cierre ordenado por la autoridad se extendiera hasta el 31 de julio.

En su comunicación al supervisor del mercado, Merlin aseguró estar «evaluando muy de cerca y con prudencia» la situación y diseñando varios escenarios de contingencia en función de la duración de la crisis sanitaria.

Además, afirmó contar con una «sólida» posición financiera para afrontar estos momentos «difíciles», gracias a su bajo nivel de endeudamiento, la diversificación de ingresos, la ocupación de sus inmuebles y la calidad de sus inquilinos, y a que cerró 2019 con una posición de liquidez de más de 1.085 millones de euros.