Sostenibilidad, financiación y transparencia: claves para el liderazgo empresarial ante la acción climática


Acompasar la sostenibilidad con la competitividad, la movilización de la financiación a gran escala, un sólido respaldo institucional y la transparencia en los datos climáticos son las claves para el liderazgo empresarial sostenible y pasar de la ambición a la acción en la lucha contra el cambio climático.

Así lo han puesto de relieve varios referentes del sector empresarial en el último evento de Generación de Oportunidades, impulsado por Europa Press junto a McKinsey & Company. El papel de la acción empresarial a la hora de alcanzar los objetivos climáticos globales, la necesidad de financiación y la regulación han centrado el análisis de directivos de Acerinox, BBVA, Enagás, GSK, y Telefónica.

Frente a esto, el director de Sostenibilidad de Acerinox, Carlos Ruiz, ha señalado que en la COP30 «se ha confirmado el compromiso de gobiernos y empresas en continuar avanzando juntos hacia la economía baja en carbono» y ha destacado como avances relevantes «la extensión de la financiación a la adaptación climática, el tema de daños y también la reforestación y la conservación de los bosques». No obstante, ha subrayado que será clave «tener una mayor ambición» en las contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC) y «rutas más específicas» para desplazar los combustibles fósiles, acelerar las renovables y avanzar en biometano e hidrógeno verde.

Asimismo, el responsable de Sustainability Advocacy de BBVA, Emilio Martín-More, ha descrito dicho evento como «la COP de la implementación», orientada a «pasar de la ambición a la acción medible». Ha destacado que la COP «ha puesto la información climática como prioridad», con una declaración de integridad de datos para combatir el greenwashing , y ha advertido de que, aunque los compromisos progresan, «el problema es la velocidad».

Por su parte, el director de Sostenibilidad y Acción Climática de Enagás, José Miguel Tudela, ha valorado que la cumbre «ha permitido a los países revisar sus compromisos, cómo avanzan y tener compromisos comunes», y ha resaltado el refuerzo de la senda europea con objetivos intermedios para 2035 y 2040, así como el impulso al acuerdo «Belém por cuatro» para multiplicar por cuatro la producción y uso de combustibles renovables, en particular hidrógeno verde.

La directora de Sostenibilidad de Telefónica, Laura Fernández Cavas, ha subrayado la ampliación de los objetivos de financiación en adaptación, «muy necesaria» porque «no se puede trabajar solo en mitigación», y ha señalado que la cumbre ha exigido «gestionar a la vez mitigación, adaptación y emergencias climáticas», ante la frecuencia de fenómenos extremos y la importancia de la conectividad para anticipar y gestionar crisis.

Por otro lado, el director de Asuntos Corporativos de GSK, Ricardo Boedo, ha apuntado que «en Belém se ha consolidado un plan de acción de salud por primera vez» y ha recordado que el cambio climático impacta en la salud: «22.000 fallecimientos al año» en España están ligados a la contaminación y «5.900 a las horas de calor», advirtiendo de que la transición energética debe incorporar prevención sanitaria y de que el sector salud debe actuar como ejemplo en descarbonización.

COMPROMISOS EMPRESARIALES Y EJECUCIÓN DE ESTRATEGIAS CLIMÁTICAS

Las compañías han defendido que sostenibilidad y competitividad pueden avanzar en paralelo, detallando planes concretos para reducir emisiones, electrificar procesos, impulsar combustibles renovables, digitalizar operaciones y alinear inversiones con la taxonomía europea.

Ruiz ha explicado que Acerinox ha fijado para 2030 un objetivo de reducción del 45% de emisiones de alcance 1 y 2, con medidas como eficiencia energética, electrificación de procesos y uso de biometano e hidrógeno verde. Además, ha insistido en la necesidad de «ser capaces de fijar objetivos ambiciosos pero alcanzables». También ha afirmado que la transición debe darse «en igualdad de condiciones a nivel global» para evitar desventajas competitivas.

En otro orden, Tudela ha indicado que Enagás ha actualizado su estrategia para incluir un objetivo de Net Zero en el alcance 3 para 2050 y ha destacado que «el 83%» de su plan de inversión a cinco años estará alineado con la taxonomía de la UE. Ha defendido que sostenibilidad y competitividad «no son variables enfrentadas», apuntando que los proyectos de hidrógeno verde avanzan junto a la garantía de suministro.

Fernández Cavas ha detallado que Telefónica dispone de una «doble capacidad de impacto»: reducir sus propias emisiones y facilitar la descarbonización de clientes y economías mediante digitalización. Ha repasado palancas de su plan climático, como la eficiencia de red y el uso de energía renovable en mercados clave, insistiendo en que «sostenibilidad y competitividad no son parámetros enfrentados».

Así, Martín-More ha manifestado que para mantener la ambición climática las empresas deben «anclarla en la estrategia de negocio», contar con un gobierno corporativo sólido y aprovechar la «ventana de oportunidad tecnológica», toda vez que ha explicado que el blended finance permitirá movilizar capital privado en países emergentes y ha adelantado que BBVA ha «más que duplicado» su objetivo de financiación sostenible hasta 700.000 millones entre 2025 y 2029.

Por su lado, Boedo ha expuesto que GSK combina medidas de adaptación y mitigación, recordando que el cambio climático «desplaza vectores» y trae enfermedades antes inexistentes, y ha detallado que el centro de I+D de Tres Cantos trabaja en malaria, tuberculosis o leishmaniasis, además de que España contará con un laboratorio privado de bioseguridad nivel 4. En mitigación, ha resaltado el plan de reducir un 80% las emisiones en 2030 y la sustitución del propelente de inhaladores, que representa el 52% de su huella y puede evitar 200.000 toneladas de CO2 en España el próximo año.

RETOS DE FUTURO

Los directivos han concluido que el reto principal es acompasar el ritmo de la transición con las exigencias regulatorias, tecnológicas y económicas, reforzando la coordinación entre países y empresas.

En la conclusión del encuentro, Ruiz ha afirmado que las empresas «seguiremos siendo punta de lanza», pero ha pedido acompasar la transición con la competitividad.

Tudela ha coincidido en que «el gran reto es el ritmo», mientras Fernández Cavas ha defendido que quienes puedan avanzar más rápido deben hacerlo y que la digitalización debe verse como motor de inclusión y descarbonización.

Martín-More ha advertido de la brecha entre ambición y ejecución, aunque con una hoja de ruta multilateral «cada vez más clara», y Boedo ha subrayado que «la salud es el principal argumento para la acción climática» y que incorporar la prevención será clave en los próximos años.

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