Sordo (CCOO) observa una «actitud bastante regresiva» en la CEOE y ve «difícil» llegar a acuerdos
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, aprecia una «actitud bastante regresiva» en la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), en comparación con la pandemia, y considera que será «cada vez más difícil» llegar a acuerdos con la patronal.
Sordo considera que una parte del empresariado español se está «contaminando del clima político» y prevé que mantendrán esas posiciones «de aquí a las elecciones generales».
«Ojalá me equivocase porque hemos sido un contrapunto al clima de tensión de las derechas», ha comentado el líder de CCOO este lunes en una entrevista con RNE, recogida por Europa Press.
Para Sordo, la voluntad de negociación de la patronal durante la pandemia respondió a que había en juego dinero público para salvar a las empresas y a los trabajadores, mientras que en las mesas de diálogo pendientes, como la del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), ya no existen recursos públicos y son los empresarios quienes tienen que poner su parte.
«Los costes de la inflación se tienen que repartir entre los recursos públicos, los salarios y los beneficios empresariales. CEOE se quiere borrar para que repercuta en los recursos públicos y los salarios de forma casi exclusiva», ha asegurado.
El secretario general de CCOO ha criticado la «falta de corresponsabilidad importante» del empresariado español y ha lamentado que sean los salarios de la clase trabajadora «quienes están pagando el pato» de esta crisis.
SMI EN 1.100 EUROS
El Ministerio de Trabajo y Economía Social desveló el pasado lunes el informe de la Comisión de Expertos sobre el SMI, que recomendaba una horquilla de subida para 2023 de entre el 4,6% y el 8,2%, lo que situaría el SMI en 1.046 euros brutos al mes por catorce pagas en el primer caso y de 1.082 euros en el segundo.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, convocó a los agentes sociales a una mesa de negociación el pasado miércoles, 21 de diciembre.
La CEOE no acudió a las negociaciones, ya que había roto las conversaciones con Trabajo unas semanas antes, a raíz de la inclusión de una enmienda transaccional en la Ley de Empleo, que devolvía a Trabajo el control de las causas de los despidos colectivos.
Los empresarios mandaron su propuesta por escrito, que contemplaba un incremento del 4%, hasta los 1.040 euros. Si bien esta revalorización se encuentra por debajo de la horquilla de los expertos, la patronal defendió que supera la subida salarial medio pactada en los convenios firmados en 2022 (3,03%) y de la subida aplicada a los funcionarios (3,5%).
Los sindicatos, por su parte, manifestaron posturas más cercanas con el informe de los expertos, aunque reclaman subidas superiores.
Sordo se ha inclinado este lunes por un alza de «entre 80 y 100 euros», y llevar el SMI hasta los 1.100 euros.
«Un Gobierno progresista tiene poco margen para no subir el SMI en esos términos. Vamos a ver qué criterio define el Gobierno, pero para nosotros no puede haber perdida de poder adquisitivo en 2023», ha subrayado.
El compromiso del Ejecutivo es terminar la legislatura con el SMI en el 60% del salario medio español. Además, Díaz abrió la puerta a revisar la cuantía dentro de seis meses para evitar la pérdida de poder adquisitivo.