Solo el 12% de los jóvenes cántabros están emancipados, la tasa más baja de España
Se debe al mercado laboral «precario» y al «alto precio» de la vivienda, según el Consejo de la Juventud
Solo un 12,2 por ciento de los jóvenes de Cantabria menores de 30 años estaba emancipado en el segundo semestre de 2020, la menor tasa de toda España, según el último Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España (CJE).
Los datos de este estudio han sido presentados este jueves en rueda de prensa por el vicepresidente del CJE, Adriá Junyent; la representante del Consejo de la Juventud de Cantabria, Kiara Brambilla; y la socióloga e investigadora María Flamarique, que ha colaborado en el Observatorio.
Según han señalado, la baja tasa de emancipación juvenil en Cantabria «está directamente relacionada con un mercado laboral de por sí precario», que registra «la segunda tasa de actividad más baja del país en estas edades», un 43,1%, casi 10 puntos menos que la media nacional, del 52,2%.
Flamarique ha destacado que la comunidad registra algunos de los indicadores laborales «más negativos de España», por lo que «no es de extrañar que muchos jóvenes cántabros vivan en otras autonomías», un 10% en el caso de los menores de 30 años, porcentaje que seincrementa hasta un 17% en la franja de edad de entre 30 y 34 años, según ha indicado.
Además, lo que está ocurriendo es que los jóvenes prolongan su periodo de formación y siguen estudiando «porque las alternativas que les da el mercado laboral no son aceptables para plantearse un futuro o poder emanciparse en su propio hogar», ha explicado la socióloga.
En este sentido, el Observatorio de la Emancipación del Consejo de la Juventud de España, que recopila estadísticas oficiales de distintos ministerios y organismos del Gobierno, precisa que al contexto laboral «precario» se une en Cantabria el «alto precio» de la vivienda, «que obliga a los jóvenes a destinar un 91% de su salario para poder acceder a una vivienda en alquiler».
Así lo ha dicho el vicepresidente del CJE, recordando que «en España menos de un 2% del parque de viviendas corresponde a viviendas sociales».
Junyent, que también es responsable del área socio-económica y el de comunicación, ha puesto de manifiesto que «con bajos salarios, más de la mitad de los jóvenes españoles con un contratos temporales y casi una cuarta parte de ellos con empleos a tiempo parcial, es muy difícil emanciparse».
Y ha dado especial valor a estudios e informes como el Observatorio de Emancipación porque «nos permite hacer una radiografía de la situación de la juventud española con unas estadísticas oficiales que sirven de referencia para demandar a lasadministraciones públicas políticas adecuadas».
Por su parte, Brambilla se ha centrado en la situación en Cantabria, «una de las autonomías con más escasez de empleo tanto en cantidad como en calidad», y ha advertido que «aunque la Covid-19 puede servir de justificación para una tasa de emancipación tan baja como la nuestra, tiene que quedar muy claro que ya teníamos una de las tasas más bajas antes y después de la pandemia».
«Con la situación laboral actual y los precios de la vivienda se hace casi imposible la emancipación porque muy pocos jóvenes cántabros tienen capacidad para ello», ha insistido la portavoz del Consejo de la Juventud en Cantabria.
A su juicio, «no cabe duda que urgen medidas específicas para los jóvenes», porque el acceder a una vivienda es «un problema social que afecta a casi todos los colectivos» y que en el caso de la juventud «se agrava, tal y como confirman todas las estadísticas oficiales».
