Sánchez anuncia que España reservará dos millones de vacunas contra la COVID-19 para contextos humanitarios
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este lunes 8 de noviembre, que España quiere reservar dos millones de las vacunas contra la COVID-19 comprometidas para países vulnerables, a contextos humanitarios.
Así lo ha avanzado en un evento conmemorativo por el 70 aniversario de la Convención de 1951 sobre el Estatuto de los Refugiados, en el que también ha participado el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, y que se ha celebrado en la Casa de América, en Madrid.
En concreto, Sánchez ha detallado que España ya ha donado 24 millones de vacunas solidarias y prevé que van a alcanzar los «50 millones» de dosis donadas en el primer trimestre de 2022, con el fin de conseguir el objetivo marcado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) de un 70% de población mundial inmunizada a mediados del próximo año.
Si bien, el presidente del Gobierno ha indicado que son «conscientes de que los mecanismos de cooperación no están consiguiendo llegar a todo el mundo» y de que «los refugiados están sufrido especialmente las consecuencias de la pandemia» porque «muchas» de estas personas han quedado «atrapadas en zonas de una extraordinaria vulnerabilidad».
Por ello, Sánchez ha anunciado que el Gobierno va a reservar dos millones de las vacunas contra el coronavirus comprometidas, para destinarlas a contextos humanitarios y van a trabajar con ACNUR y otras instituciones para lograr «que estas vacunan lleguen donde más se necesitan».
Tras señalar que no puede pensar en una «condena más terrible» que la que sufren los refugiados al tener que dejar atrás su país, Sánchez ha ensalzado la «solidaridad» del pueblo español con los refugiados y ha destacado que España es el primer donante privado de ACNUR de todo el mundo.
El presidente del Ejecutivo también se ha referido a la crisis humanitaria en Afganistán, «otra de las grandes causas de extrema preocupación» y ha dicho que nunca va a olvidar a los afganos y afganas a los que recibieron en Torrejón.
REFUGIADOS CLIMÁTICOS
En todo caso, ha precisado que lo que sucede en Afganistán no puede hacer olvidar otras situaciones como la que se vive en el Sahel, donde «no solo los conflictos» sino también «la emergencia climática» obligan a sus habitantes a abandonar su tierra.
Esta situación, según ha añadido, debe provocar una reflexión sobre el estatuto de protección internacional que se quiere dar a los refugiados climáticos.
Tampoco se puede olvidar, según ha señalado, de los «más de 5 millones de refugiados venezolanos», a los que «desgraciadamente se están uniendo los refugiados nicaragüenses». En 2020, según ha precisado, la venezolana fue la primera nacionalidad que solicitó asilo en España. En este sentido, ha indicado que España está comprometida con la tarea de destinar 100 millones de euros entre las dos conferencias de donantes celebradas para Venezuela.
Por otro lado, Pedro Sánchez ha anunciado que el Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación está ultimando la que será la «primera estrategia de diplomacia humanitaria».
La estrategia, para cuya elaboración se está consultando a la sociedad civil, «va a proporcionar un marco oportuno para una coyuntura actual absolutamente dramática marcada por la necesidad de dar respuesta a las necesidades humanitarias» en situaciones de crisis como la de Afganistán, Libia, Siria, el Sahel o también América Latina, y en particular Centroamérica, ha añadido el presidente, sin entrar en más detalles.
La aprobación de la estrategia de diplomacia humanitaria ya aparece mencionada en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) presentado recientemente por el Gobierno dentro del Ministerio de Asuntos Exteriores, en el que se precisa que debería producirse «durante el segundo semestre de 2021».
«El objetivo actual es diseñar una estrategia nacional, que dé coherencia y carácter de permanencia a las prioridades españolas en materia humanitaria, y contribuya a construir un perfil claro y potente en esta materia que es ya, una prioridad española», explica el Gobierno en los PGE.
En el acto de este lunes, conducido por el presentador Jesús Vázquez, también ha intervenido el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, quien ha agradecido la «generosidad de España con las personas refugiadas».
Así, Grandi ha destacado los «esfuerzos» realizados por las autoridades durante los últimos meses para «responder a la difícil situación en Afganistán» o su apoyo a los «programas solidarios de vacunación contra la Covid»; y también ha aplaudido la labor de Salvamento Marítimo.
El Alto Comisionado ha subrayado que la celebración del 70 aniversario de la Convención de 1951 sobre el Estatuto de los Refugiados sirve para reflexionar sobre «el valor» de la convención gracias a la cual «se han podido salvar millones de vidas». Los dos principios de esta convención, según ha precisado, son: «El derecho de toda persona a buscar asilo y la prohibición absoluta de devolver al refugiado».
Sobre la pandemia, el Alto Comisionado ha recordado que «casi 200 países cerraron sus fronteras y más de 60 de ellos no hicieron ninguna excepción con los solicitantes asilo», y ha añadido que «los muros son hoy la imagen de la denegación del acceso al asilo».
NO A LAS DEVOLUCIONES EN FRONTERA
«En todo el mundo vemos a diario ejemplos de devoluciones y violencia en fronteras, sabemos el reto que suponen las llegadas irregulares, es importante buscar soluciones humanas que no se contrapongan a los derechos fundamentales», ha pedido.
Entre las buenas prácticas, Grandi ha invitado a promover el reasentamiento, los visados humanitarios y las becas para estudiantes refugiados, y ha propuesto que los proyectos de patrocinio comunitario que ya se desarrollan en algunas comunidades «puedan expandirse por todo el país a través de un programa nacional».
Durante el acto, también han ofrecido su testimonio la boxeadora y refugiada afgana Sadaf, que tuvo que huir con su familia cuando los talibán se hicieron con el control del país; y la activista, politóloga y refugiada somalí Amal, que se salvó de la mutilación genital femenina gracias a su madre, que se opuso a someterla a esta práctica.
Entre otros intervinientes, también se encontraban la soprano Barbara Hendricks, embajadora de Buena Voluntad Honoraria y Vitalicia de ACNUR, quien ha recordado que hay 82 millones de personas desplazadas de forma forzosa; una de cada 95 personas en el mundo, tal y como ha añadido el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.
Por su parte, la periodista Rosa Montero ha advertido de la «falacia cognitiva» de quienes rechazan ocuparse de las personas refugiadas argumentando que ya hay mucha gente pobre en España; y el jurista español y presidente de honor del Comité Español de ACNUR, Antonio Garrigues, quien ha recordado que España también tuvo «muchos emigrantes económicos y muchos refugiados políticos».