Sémper dice que el concierto vasco es «diametralmente opuesto» al pactado con ERC, que «hace saltar todo por los aires»
El PP asegura estar «verdaderamente sorprendido» por la subordinación del PNV a Sánchez y su «silencio ante la corrupción a cambio de nada»
BILBAO, 29
El portavoz del PP, Borja Sémper, se ha mostrado convencido de que el Concierto Económico Vasco y el Convenio de Navarra son «diametralmente opuestos» a lo pactado con ERC, que «hace saltar todo por los aires». Además, ha asegurado que el PP esta «verdaderamente sorprendido» por la «subordinación» del PNV a Sánchez y su «silencio» ante «los supuestos casos de corrupción que acosan» al Gobierno, «a cambio de nada»
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Sémper ha considerado que el Concierto Económico vasco «se ve perjudicado por la forma de funcionar de Sánchez, que ha vuelto a despertar en España un debate profundamente erróneo sobre Concierto vasco el navarro».
En este sentido, ha afirmado que el Concierto de Euskadi y el Convenio en Navarra «son figuras institucionales porque están dentro de la Constitución y porque fueron votadas por el conjunto de los españoles». «Esto es algo absolutamente diametralmente opuesto a lo que está haciendo Sánchez en Cataluña», ha criticado.
Asimismo, ha dicho que Pedro Sánchez, para investir a Salvador Illa como president, «está dispuesto a cambiar el modelo de financiación de toda España» para ello, a exigencia de ERC. «Parece razonable que el resto de presidentes de comunidades autónomas digan, oiga, ¿qué broma es esta?. Están en juego los servicios públicos, la asistencia sanitaria, educativa, de otras partes de España. ¿No éramos un país redistributivo?, ¿no defendíamos que el que más tiene contribuye a que le vaya algo mejor al que menos tiene?», ha preguntado.
Para el dirigente popular, «todo esto salta por los aires con este acuerdo por la puerta de atrás que plantea Sánchez en Cataluña». «Por eso, es diametralmente opuesto al Concierto vasco y al navarro», ha indicado.
NO VALE UN ACUERDO BILATERAL
A su juicio, «la financiación autonómica no se puede hacer de manera bilateral, porque cada comunidad autónoma, en función de determinadas circunstancias, población, renta per cápita, infraestructuras preexistentes, es asimétrica también».
«Por lo tanto, son negociaciones multilaterales, en las que existen foros ya creados para que se pueda debatir sobre la financiación de todos, para garantizar cierta equidad, para garantizar el equilibrio y el acceso a los servicios públicos de los ciudadanos independientemente de donde vivan. Por eso, esta negociación se tiene que hacer entre todos», ha añadido.
Borja Sémper ha insistido en que «no es razonable» lo que se está haciendo en Cataluña. Por ello, los presidentes de las comunidades autónomas del Partido Popular han pedido ponerse de acuerdo «en un documento de mínimos y una exigencia de mínimos al Gobierno».
«Por eso no va a haber nadie que haga nada raro, porque los presidentes de las comunidades autónomas defienden los intereses de sus comunidades autónomas y de sus ciudadanos, faltaría más, a los que se deben, pero también tienen visión de Estado y la extremeña no quiere que le vaya mal al valenciano; el murciano no quiere que le vaya mal al castellano leonés», ha manifestado.
Sémper ha remarcado, además, «que aquí la única quita de deuda que se ha producido es en Cataluña», mientras que «el resto de las comunidades autónomas están pagando religiosamente sus deudas y tienen que afrontar sus compromisos de la manera que tenían que hacerlo antes».
«Y si esto cambia, tendrá que ser entre todos. Yo le puedo asegurar que estas negociaciones se deberán de producir entre todos, con transparencia, con claridad y defendiendo el interés general. Y esto es lo que van a defender todos los presidentes y comunidades autónomas del PP, se lo puedo asegurar», ha dicho.
EN UNA U OTRA CÁMARA, SÁNCHEZ DEBERÁ COMPARECER
Tras los intentos del PP para que Pedro Sánchez comparezca en el Congreso, sin éxito, ha asegurado que intentarán que lo haga en el Senado. «Si hay cambios en política internacional, Sánchez debe dar explicaciones. Si hay cambios en el modelo de financiación de todos los españoles, Sánchez tiene que dar explicaciones, y su ministra de Hacienda. Si hay sospechas de corrupción graves, debe dar explicaciones», ha añadido.
Tal como ha explicado, no ha sido posible forzar la comparecencia de Sánchez en el Congreso porque el resto de partidos, entre ellos el PNV, «le han vuelto a echar un cable, pero en el Senado tendrá que comparecer».
Sobre los reproches a los nacionalistas por parte del portavoz del Grupo popular, Miguel Tellado, y la respuesta del PNV, que le llamó «torpe», ha dicho que son «rifirrafes políticos o parlamentarios que tampoco deberían asustar mucho».
«Es verdad que nosotros estamos verdaderamente sorprendidos por cómo está el PNV subordinado a Sánchez a cambio de nada. Y señalamos el silencio del PNV ante los supuestos casos de corrupción que acosan a este Gobierno y al entorno del presidente del Gobierno. Sorprende el silencio del PNV y sorprende también que el PNV le eche un cable al Gobierno para que no dé explicaciones en materia de política internacional», ha añadido.
Según ha recordado, «ya lo hizo con el cambio de política sobre el Sáhara y el PNV no exige a la Sánchez explicaciones». Y ahora sorprende también que el PNV, con su voto, permita que Sánchez no dé explicaciones sobre la posición sobre Venezuela. Esto no es estar más o menos lejos del PNV. Nosotros tenemos una posición política y el PNV tendrá la suya. No pasa nada. Esto es la democracia y el pluralismo», ha indicado.
A su juicio, los jeltzales ya tenían que haber «tomado nota» de a dónde les lleva esto. «Nosotros no estamos en una estrategia de desgaste, sino de exigencia de explicaciones. Es que la oposición, tiene el mandato constitucional y está obligada a controlar la acción del Gobierno», ha subrayado. En cuanto a Junts, ha dicho que está siendo «coherente» con la posición que ha mantenido históricamente, mientras que el PNV no».
«Nadie se tiene que picar porque señalemos la subordinación al Gobierno (por la formación jeltzale), y Junts hará lo que considera oportuno, faltaría más. Yo creo que en estos momentos a nadie se le escapa que Junts tiene una actitud revanchista en relación con el Gobierno, pero esto es una cosa que tendrán que resolver Junts y Sánchez. No nos compete a nosotros tampoco solucionarles a ellos los problemas de convivencia», ha añadido.
Preguntado por si han descartado una moción de censura, ha subrayado que hay que presentarla «cuando tienen alguna virtualidad», y aunque «estaría más que justificada» por «todo lo que está pasando en España, hoy no se dan las condiciones» porque no se conseguirán los «apoyos suficientes».
RELACIÓN CON PRADALES
Por otra parte, respecto a Euskadi, ha confiado en que su partido y el Lehendakari mantengan «una relación educada y constructiva» y que «exista una relación de gobierno-oposición».
«Con normalidad y con naturalidad, el señor Pradales es el Lehendakari y tendrá que tener una relación normalizada, institucional también, con un partido de la oposición», ha dicho. No obstante, ha advertido de que los populares vascos aspiran a «ser la alternativa también en Euskadi».
El portavoz popular se ha referido al ambiente político que se vive en Madrid, donde «es todo menos una política» y ha recordado que en Euskadi, «incluso en los peores momentos se mantenía la institucionalidad».
«Eso, desgraciadamente, no existe en el Congreso de los Diputados y creo que hay una vocación decidida de que esa grieta se vaya ensanchando», ha indicado, para expresar su temor de que «termine por contagiar a la sociedad. «No sé si es envidia, pero sí me gustaría que el Congreso de los Diputados se pareciera más a menudo al Parlamento Vasco», ha indicado.