SERAM reivindica la realización de TAC de tórax para detectar precozmente el cáncer de pulmón
La Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM) ha reivindicado que la realización de la tomografía computarizada (TC o TAC) de tórax de baja dosis de radiación en personas de riesgo detecta precozmente el cáncer de pulmón, lo que reduce su mortalidad.
En el marco del Día Mundial Contra el Cáncer de Pulmón, SERAM ha señalado que los fumadores activos y exfumadores mayores de 50 años con una carga tabáquica significativa son las personas que más se benefician del TAC.
En este sentido, la sociedad ha recordado que el cáncer de pulmón, sin cribado, mata más que la suma de las muertes por cáncer de colon, mama y próstata, y la supervivencia global a los 5 años es menor del 15 por ciento. Si se detectan los cánceres de pulmón de forma precoz con una TC de tórax, la supervivencia mejorará, asegura.
«Entre las ventajas de la TC de tórax de baja dosis de radiación hay que destacar que se trata de una prueba sencilla, rápida, indolora y cómoda de realizar, en la que no se requiere la administración de contraste intravenoso. Además, utiliza una radiación mucho menor que un estudio de TC convencional. La TC de tórax es la mejor herramienta diagnóstica para el estudio del pulmón, y además de detectar nódulos pulmonares permite evaluar también las calcificaciones de las arterias, la presencia de enfisema pulmonar o si una persona tiene osteoporosis», ha apuntado el especialista de la SERAM, radiólogo torácico del Hospital Universitario Ramón y Cajal y miembro del comité científico del proyecto CASSANDRA, primer proyecto piloto nacional sobre cribado de cáncer de pulmón con TC de tórax en España, Luis Gorospe.
Según SERAM, a través del Parlamento Europeo, la Unión Europea ya se pronunció de forma «clara y firme» en 2022 sobre este tema a favor del cribado de cáncer de pulmón con TC de tórax de baja dosis de radiación, emplazando a los países de la Unión a iniciar programas de cribado de cáncer de pulmón a nivel nacional. De hecho, «ya hay varios países europeos que han puesto en marcha programas nacionales de cribado de cáncer de pulmón o están implementando proyectos piloto para explorar los recursos sanitarios necesarios y su factibilidad», indican desde la sociedad.
Asimismo, para SERAM, además de detectar precozmente el cáncer de pulmón, los programas de cribado con TC de tórax suponen una «excelente oportunidad» para detectar otras patologías frecuentes en las personas fumadoras y exfumadoras, como las calcificaciones coronarias (como marcador de cardiopatía isquémica) o el enfisema pulmonar (como marcador de EPOC).
Desde la segunda mitad del siglo XX se ha venido investigando la forma de detectar precozmente el cáncer de pulmón con técnicas de imagen, inicialmente con radiografía de tórax y posteriormente con la TC de tórax. Hace más de 20 años se lanzó en EEUU el primer ensayo clínico aleatorizado que comparaba la detección precoz del cáncer de pulmón con TC y con radiografía de tórax, en el que se demostró por primera vez que la TC de tórax reducía la mortalidad por cáncer de pulmón en un 20 por ciento.
Este primer ensayo clínico demostró también que la mortalidad global disminuía en un 7 por ciento, probablemente debido a que en una TC de tórax se detectan más enfermedades además de posibles cánceres de pulmón. Desde entonces se han puesto en marcha más ensayos en otros países, también en Europa, algunos de los cuales han demostrado incluso mejores resultados en términos de reducción de mortalidad, particularmente en mujeres.
«Estoy convencido de que el cribado de cáncer de pulmón va a ser una realidad en los próximos años a nivel nacional y que va a cambiar de forma drástica la historia natural de este cáncer», ha añadido Gorospe.
El experto también ha señalado que «los radiólogos tenemos una privilegiada visión transversal del cáncer de pulmón, ya que participamos en todo el proceso desde el diagnóstico precoz hasta la valoración de la respuesta al tratamiento, pasando por la estadificación (cómo de extendido está un cáncer) o la realización de biopsias pulmonares. Con respecto al cribado de cáncer de pulmón los radiólogos jugamos un rol muy importante informando los estudios de TC de tórax, decidiendo qué nódulos pulmonares requieren la realización de pruebas complementarias (realización de un estudio de PET/TC o de una broncoscopia, por ejemplo), o describiendo hallazgos incidentales en los estudios de TC de tórax que también requieran ser valorados por otros médicos especialistas (por ejemplo, la presencia de enfisema o de calcificaciones de las arterias coronarias), etc.».