SEMICYUC cree que eficacia del Código Sepsis en pandemia confirma que se debe implantar en todos los hospitales
El Grupo de Trabajo de Enfermedades Infecciosas y Sepsis de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC) afirma que «la eficacia del Código Sepsis durante la pandemia manifiesta la necesidad de implantarlo en todos los centros hospitalario».
La sepsis provoca una muerte cada 2,8 segundos y casi 50 millones de personas la sufren anualmente. Es una enfermedad compleja secundaria a una infección que puede conducir a la disfunción multiorgánica y a la muerte; una emergencia médica que requiere atención inmediata y que lleva asociada una grave carga sanitaria y económica, tanto para el paciente como para los sistemas de salud de todo el planeta.
El próximo lunes 13 de septiembre se celebra el Día Mundial de la Sepsis, una fecha que recuerda la importancia de avanzar en el estudio, control y tratamiento de este síndrome, consecuencia de una respuesta inmunitaria exagerada a la infección.
La implementación del Código Sepsis en las Unidades de Cuidados Intensivos, y en el resto de las áreas hospitalarias, ha permitido disponer de una importante infraestructura de detección precoz de pacientes con esta patología, incorporando procedimientos, estrategias y protocolos de manejo que reducen la mortalidad y la morbilidad, independientemente de la causa que lo desencadene.
Además, como explican desde el Grupo de Trabajo, «permite una atención de mayor calidad, homogénea y con la mayor capacidad de resolución posible, basada en la coordinación de los profesionales implicados en la atención de la sepsis».
La sepsis es la respuesta de nuestro propio organismo a una infección, pero esta respuesta daña gravemente nuestros propios tejidos y órganos. Así, enfermedades infecciosas nuevas como el SARS CoV-2, que además pueden desarrollar sepsis por sí mismas, obligan a los intensivistas a redoblar esfuerzos.
Un importante número de pacientes ingresados en las UCI por COVID-19 han fallecido en el contexto de un shock séptico.
El Estudio Nacional de Vigilancia de Infección Nosocomial en Servicios de Medicina Intensiva (ENVIN) de la SEMICYUC alertó este año de que los pacientes COVID-19, en lo concerniente a las infecciones asociadas a dispositivos, presentan mayor respuesta inflamatoria en forma de sepsis y/o shock séptico durante su estancia en UCI, en comparación a los datos de 2019.
«Disponer en los hospitales del Código Sepsis ha permitido en época de pandemia identificar precozmente al enfermo séptico en todos los ámbitos asistenciales, mediante un abordaje coordinado multidisciplinar. Además, garantiza la implantación de manera inmediata de medidas eficientes que reducen la mortalidad de la sepsis», explican los expertos del Grupo de Trabajo.