SEICAP avisa de que las falsas creencias dificultan el control del asma en niños y adolescentes
La Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP) ha avisado, con motivo de la celebración, el próximo 4 de mayo, del Día Mundial del Asma, de que las falsas creencias dificultan el control del asma en niños y adolescentes.
Uno de cada diez niños en edad escolar tiene asma, que es una de las enfermedades crónicas más frecuentes en la infancia. «Por lo general, suele haber una serie de falsas creencias que conllevan un difícil control de la enfermedad y que pueden hacer aumentar las crisis asmáticas y por lo tanto los ingresos hospitalarios. Las que más pueden influir en ello son las relacionadas con el tratamiento, ya que muchas veces no se utiliza o se administra de una manera errónea», ha subrayado el presidente del Grupo de Trabajo de Alergia Respiratoria y Asma de SEICAP, Luis Moral.
De hecho, durante la adolescencia suele haber problemas de adhesión al tratamiento debido, entre otros factores, a la desinformación y a las suposiciones incorrectas sobre el asma, según un trabajo realizado por la Academia Europea de Alergia e Inmunología Clínica (EAACI, por sus siglas en inglés). «Los adolescentes tienen más acceso a Internet y a las redes sociales y estas fuentes pueden ser peligrosas para ellos si no se sabe identificar la información veraz», ha añadido este especialista.
El principal tratamiento indicado para el control del asma son los corticoides inhalados, siendo este un tipo de medicamento sobre el que existe una corriente de opinión negativa por sus posibles efectos secundarios. De hecho, un trabajo reciente publicado en Swiss Medical Weekly recuerda la importancia de educar a las familias e informarles de los potenciales beneficios de los corticoides y de disipar sus falsos mitos.
«Como cualquier otro medicamento, los corticoides pueden tener sus efectos secundarios, pero sabemos que, cuando los usamos en dosis bajas, pueden ser administrados durante largos periodos de tiempo, de meses o años, sin producir efectos apreciables y permitiendo un buen control del asma, reduciendo los síntomas y las crisis, con un gran beneficio para los pacientes», ha apuntado el doctor Moral.
En cualquier caso, deberá ser el pediatra alergólogo el que determine el tratamiento de forma individualizada para cada caso y en función de los factores etiopatogénicos, la gravedad y la respuesta obtenida. «El objetivo principal debe ser siempre obtener el máximo control de la enfermedad, así como reducir al máximo la posibilidad de efectos adversos. Por eso es importante informar bien a las familias y a los propios niños sobre su enfermedad, los desencadenantes del asma, las medidas de evitación y cómo actuar en caso de crisis. En este sentido, la labor de educación sanitaria es muy importante», ha comentado Moral.
Por ello, desde el Instituto #SaludsinBulos se ha destacado la importancia de acudir a fuentes de información fiables. «Las sociedades científicas y las asociaciones trabajan para ofrecer información veraz a los pacientes y sus familias, y es fundamental que tanto el profesional sanitario como el paciente sepan identificar los bulos entre todos los contenidos que se encuentran en la Red», ha aseverado el coordinador del Instituto #SaludsinBulos, Carlos Mateos.
PRINCIPALES MITOS RELACIONADOS CON EL ASMA
En este sentido, el Grupo de Trabajo de Alergia Respiratoria y Asma de SEICAP en colaboración con el Instituto #SaludsinBulos ha contribuido con el siguiente listado a desmontar los principales mitos sobre asma destacados por la Global Initiative for Asthma (GINA).
Así, han informado de que el asma es una de las enfermedades crónicas más frecuentes durante la infancia pero puede aparecer también en la edad adulta. Conforme el niño va creciendo puede ir mejorando hasta llegar incluso a desaparecer. Si el asma infantil es de origen alérgico tiene tendencia a persistir durante más tiempo aunque también puede mejorar con tratamiento preventivo, si bien la evolución del asma a lo largo de la vida del individuo no es fácil de predecir.
Del mismo modo, han negado que el asma sea una enfermedad contagiosa. Sin embargo, las infecciones respiratorias virales (como el resfriado común y la gripe) suelen provocar un empeoramiento o crisis en los pacientes asmáticos. Las causas del asma suelen ser diversas, incluidas las alergias, pero no se trasmiten entre individuos.
«Los niños con asma deben practicar deporte ya que ayuda a mejorar la salud general y el control del asma en particular, lo que resulta positivo para su enfermedad. Además, les permite tener una buena condición física y un peso adecuado. Hay deportistas de alto nivel que tienen asma y pueden practicar ejercicio con unas medidas de control de su enfermedad», han apostillado.
Finalmente, las organizaciones han informado de que el asma se controla con mayor frecuencia con corticoides inhalados en dosis bajas, que pueden utilizarse durante mucho tiempo (meses o años) sin efectos adversos apreciables. Existen otros medicamentos que nos ayudan a controlar el asma sin tener que aumentar las dosis de corticoides inhalados. El pediatra alergólogo valorará una serie de factores, como la intensidad de los síntomas, su frecuencia y duración, entre otros, que determinan la conveniencia o no del tratamiento preventivo.