SATSE propondrá al Gobierno la jubilación anticipada de los enfermeros: «Es una enorme deuda con la profesión»
El sindicato de enfermería SATSE propondrá al Gobierno la aprobación de una norma que permita acceder a los enfermeros a la jubilación anticipada de manera voluntaria, ya que los profesionales sanitarios conviven con diversos riesgos de la profesión y han considerado que es una «enorme deuda» que se ha de resolver con «urgencia» porque «es una cuestión de justicia social».
Así lo ha manifestado este miércoles en rueda de prensa el presidente de SATSE, Manuel Cascos, quien ha comparecido ante los medios acompañado de la secretaria general de Organización, Laura Villaseñor. Ambos responsables han reiterado que esta petición es un objetivo estratégico y que se plantea por cuatro razones: riesgos específicos de la profesión, especial deterioro de los profesionales, la viabilidad de la medida y por su necesidad, tanto para los pacientes como para el Sistema Nacional de Salud (SNS).
En este sentido, Cascos ha defendido que posibilitar la jubilación daría respuesta a mejorar la exposición a los múltiples riesgos a los que se enfrentan y ha insistido en que permitiría la integración de personal más joven, por lo que se mejoraría la calidad al paciente.
Asimismo, el presidente ha explicado que los enfermeros cumplen los mismos requisitos que otros colectivos profesional, como los policías, trabajadores del sector ferroviario, entre otros, a los que el Gobierno ya les ha aplicado un coeficiente reductor de la edad de jubilación en virtud de la Ley General de la Seguridad Social.
Al respecto, ha detallado los riesgos a los que se exponen los profesionales, como los riesgos biológicos (COVID o sida), riesgos químicos (gases anestésicos), riesgo físico (referente a espacio, humedad y ventilación), riesgos psicosociales (turnicidad, nocturnidad, sobrecarga laboral y estar permanentemente ligados al dolor, muerte, violencia) o padecer el síndrome Burnout .
El plan estratégico consiste, según ha precisado Manuel Cascos, en el establecimiento de coeficientes reductores con dos condiciones: mínimo de 15 años cotizados en la seguridad social y en las cotizaciones hay una cotización adicional que hará el trabajador y otra que hará la empresa.
«Esto permitiría que los profesionales con 35 años cotizados, se jubilen a los 60 y las que llevan 39 años cotizados, se jubilen a los 39 años. Este sistema no conlleva una sobrecarga al sistema de pensiones ni a la seguridad social», ha asegurado.
Para llevar a cabo esta petición, SATSE ha anunciado que se reunirá con los ministerios afectados para proponer iniciativas parlamentarias y ha enfatizado que las acciones informativas tendrán lugar en toda España. «A un enfermero no se le puede exigir el estado de alerta y vigilancia permanente que exige su profesión durante 30 años. No es lo mismo tener 55 años que 35 años. No podemos olvidar que cada día, los profesionales asumen la enorme responsabilidad de salvar vidas y para ello ponen en riesgo la suya», ha sentenciado.
FACTOR DE GÉNERO
Por su parte, Laura Villaseñor ha sostenido que en el caso del colectivo de enfermería existe un importante componente de género, ya que no se valora la sobrecarga emocional que implica la labor que realizan.
«Los enfermeros durante su vida laboral están en contacto permanente con el dolor y la muerte, lo que supone una gran carga emocional, que además conlleva consecuencias para su salud. Esta sobrecarga emocional está invisibilizada y es ahí dónde entra en cuestión el género», ha asegurado.
En esta línea, la secretaria general ha añadido que culturalmente los cuidados se han asociado a las mujeres «y se traduce en una infravaloración» y esta situación choca con el reconocimiento de la dureza que poseen otras profesiones ligadas, en la mayoría de los casos a un esfuerzo físico, y que se han vinculado a los roles masculinos y que sí tienen reconocida la jubilación anticipada.
«La OIT ha definido de lo que son los trabajos penosos no solo habla de dureza física sino también de labores que conllevan una exigencia importante psíquica, como es nuestro casos. El colectivo de los sanitarios reúne todas los requisitos para que se nos reconozca esta demanda en cuanto a penosidad, toxicidad, peligrosidad y a insalubridad», ha finalizado.