Satse denuncia el «aumento de deficiencias e irregularidades» en las residencias de mayores
El sindicato de Enfermería (Satse) ha denunciado el «aumento de las deficiencias e irregularidades» en las residencias mayores, y ha criticado que la patronal privada, que gestiona tres de cada cuatro centros, siga generando «grandes beneficios» en un «lucrativo negocio» que, a su juicio, «no responde como debería» a las necesidades de atención y cuidados de este colectivo social.
«Tras la pandemia del Covid-19 y numerosos compromisos por parte de partidos y gobiernos de mejora de la situación de este tipo de centros sociosanitarios, las enfermeras y fisioterapeutas que trabajan en las residencias siguen sufriendo graves problemas y deficiencias que tienen una repercusión directa y muy negativa en un importante porcentaje de los cerca de 400.000 mayores que ocupan una plaza en España», ha dicho Satse.
De hecho, ha informado de que en los últimos meses ha recibido «cientos de quejas y reclamaciones» de profesionales de Enfermería y Fisioterapia que trabajan en las residencias con un mismo «denominador común», la «falta de recursos materiales» por no contar con la financiación «suficiente» y el «déficit» de plantillas.
«Esta lamentable realidad provoca que los mayores que residen en estos centros no reciban la atención y cuidados que se merecen, teniendo en cuenta, además, que son un colectivo especialmente vulnerable y frágil, al ser dependientes o personas pluripatológicas y con procesos crónicos de salud en el 80 por ciento de los casos», han apuntado desde la organización sindical
Según Satse, se trata de una situación que es «especialmente censurable» en el caso de las residencias privadas, las cuales cobran una media de 2.000 euros al mes por cada residente. Un «lucrativo negocio» que llevó ya hace unos años a grandes fondos de inversión y de capital riesgo, aseguradoras, constructoras y compañías participadas por grandes fortunas a copar el capital de las principales empresas del sector.
Respecto a la atención y cuidados a los residentes, el sindicato ha dicho que el «principal problema» denunciado por los profesionales es la falta de tiempo y recursos para realizar su labor, ya que existe un «gran déficit» de plantillas y sus condiciones laborales son muy precarias.
«Se dan numerosas situaciones en las que tienen que atender hasta 200 mayores residentes con los consiguientes riesgos para la salud de los mayores y también, a medio y largo plazo, la de los propios profesionales. Por ello, pedimos, desde antes de la pandemia del COVID-19, que se cambie el actual modelo existente y se implementen medidas y actuaciones que garanticen una asistencia y cuidados seguros y de calidad a los mayores. Un modelo en el que las enfermeras, por su formación, cualificación y competencias, pueden hacer frente a todas las necesidades de gestión, dirección y coordinación que se requieran para responder de forma integral, coordinada y eficiente a las necesidades de atención y cuidados», ha recalcado.
Asimismo, el sindicato ha solicitado la realización de auditorías exhaustivas e independientes en todos los centros sociosanitarios, ya sean públicos, privados o concertados, cuyas conclusiones se hagan públicas, y que se establezcan protocolos y normas básicas de obligado cumplimiento en aspectos tales como la atención sanitaria y cuidados, higiene, alimentación, ocio y tiempo libre, ejercicio y apoyo psicológico de los mayores residentes.
Por último, Satse ha recordado que en, en el marco de la Comisión para la reconstrucción social y económica de España, en el Congreso de los Diputados, los partidos políticos acordaron la puesta en marcha de numerosas medidas y actuaciones para garantizar una atención adecuada en los centros sociosanitarios, «pero, a fecha de hoy, más de dos años después, no se ha hecho prácticamente nada».