Santander asegura que no tiene problemas de calidad del aire y la Zona de Bajas Emisiones no es «el único camino»

Tomará una decisión al respecto «el año que viene»

El Ayuntamiento de Santander sigue con su hoja de ruta y antes de hacer «cualquier tipo de planteamiento» sobre la delimitación de Zona de Bajas Emisiones (ZBE) recabará «todos los datos que soporten esa decisión», que tomará «el año que viene», si bien ha apuntado que la ciudad «no tiene problemas de calidad del aire» y esta medida no es «el único camino».

Así lo ha trasladado este miércoles el concejal de Movilidad Sostenible, César Díaz, que ha explicado que la ZBE busca, a través de la restricción de la circulación de los vehículos más contaminantes, mejorar la calidad del aire, por lo que ve «importante» tener datos sobre cuál es actualmente los datos de la calidad del aire.

Al respecto, ha indicado que, de acuerdo a las mediciones de las dos estaciones del CIMA, «Santander no tiene problemas de calidad del aire», por lo que cree que no se puede plantear el mismo escenario de partida para todas las ciudades, cada una tiene que saber qué mejoras quiere conseguir y qué medidas hay que tomar para ello.

«No podemos ir a ciegas causando problemas a las personas si no sabemos que esos problemas van a derivar en algo», ha valorado el edil, que ha abogado por que todas las medidas que se implanten sean «para conseguir algo concreto y que mejore lo que tenemos».

De esta forma, ha asegurado que el Consistorio sigue con la hoja de ruta y «cumpliendo con los plazos que establecen los fondos europeos para la implantación de las zonas de bajas emisiones».

En este sentido, Díaz se ha referido a los sensores, que ya se han recibido y ahora se está determinando cuál es la ubicación en la que hay que instalarlos para poder captar datos que sirvan después para «modelizar» cuál es el escenario de partida y, a partir de ahí, hacer «distintas alternativas en cuanto a lo que puede suponer esas restricciones en el tráfico, si realmente al final van a conseguir una mejora en la calidad del aire». «Evidentemente el año que viene tiene que ser un año en el que ya se puedan tomar decisiones», ha dicho.

Según Díaz, esta hoja de ruta es compartida por «la mayoría» de las ciudades que, ha señalado, se han revelado ante el planteamiento, por decreto, de tener el 1 de enero delimitadas las zonas de bajas emisiones. «No era en absoluto congruente», ha opinado Díaz, que ha insistido en que «hace falta hacer unos trabajos previos».

Ha explicado que esto lleva a que las ciudades que tienen implantadas una zona de bajas emisiones en la actualidad, pero «como Dios manda, no una ni dos calles, «las contamos con los dedos de la mano».

«La implantación de la zona de bajas emisiones no es porque sí, porque hay que implantarla, es decir, tú la implantas para conseguir algo. Si ese algo que hay que conseguir tú ya lo tienes conseguido… pues igual es otra cosa la que tienes que hacer y no una zona de bajas emisiones», ha apuntado.

En este punto, Díaz ha asegurado que el decreto señala la zona de bajas emisiones como «un camino para conseguir mejoras en la calidad del aire», pero, ha subrayado «no es el único camino que existe» ni la eficacia «son las mismas». «Si tú ya lo tienes, ¿por qué voy a generar afecciones? Yo creo que es de puro sentido común», ha añadido.

FONDOS EUROPEOS

En cuanto a las ayudas de los fondos europeos para la mejora de la calidad del aire, Díaz ha asegurado que el Ayuntamiento no tiene «ninguna luz roja» que esté marcando «incumplimientos», y sigue «dentro» de la planificación y la cronología de la convocatoria.

Así, el Consistorio se encuentra en el proceso de ejecución, y ha apuesto como ejemplo los dos autobuses eléctricos que se ha incorporado hoy a la flota del TUS, que forman parte de dicha convocatoria de fondos europeos, así como las escaleras mecánicas de Jesús de Monasterio que se han inaugurado la semana pasada o los sensores de las zonas de bajas emisiones.

Díaz ha hecho estas declaraciones en la presentación de dos nuevos autobuses eléctricos que se incorporarán a la flota del servicio de transportes urbanos (TUS).