Sanidad reitera su voluntad de diálogo para evitar la huelga y licitará «ya» las cámaras de los centros de salud

Este año se han notificado 200 incidentes violentos con sanitarios, con 23 expedientes abiertos y sanciones previstas de 3.000 a 6.000 euros

El consejero de Sanidad, Raúl Pesquera, ha reiterado la voluntad de «diálogo y entendimiento» de su departamento para evitar la huelga convocada a partir del 7 de noviembre por el Sindicato Médico, con el que está negociando y al que ha propuesto medidas entre las que hay incentivos económicos, un compromiso de hacer fijos a 141 médicos de familia y actuaciones para evitar las agresiones a profesionales sanitarios en los centros de salud.

En este sentido, la Consejería tiene previsto dotar de personal de seguridad a algunos centros y colocar cámaras en los 42 centros de salud de la región. Tras visitar cada uno de ellos para preparar su instalación, el contrato para estos nuevos equipos se licitara «ya, en breve».

Y es que el tema de la seguridad es algo que «preocupa» a la Consejería Sanidad y «no ha parado de hacer cosas» para evitar agresiones y mejorar los circuitos para que los profesionales las comuniquen, pues en lo que va de año se han notificado 200 incidentes violentos y hay abiertos 23 expedientes. En cuatro de ellos se ha comunicado la primera notificación a los agresores, con sanciones previstas de entre 3.000 y 6.000 euros, y en los casos de reincidencia podrían llegar a los 15.000, como marca la ley.

Así lo ha dicho el consejero en el Pleno del Parlamento de este lunes, en respuesta a una interpelación de Vox y a preguntas de Ciudadanos (Cs) por las medidas que tomará Sanidad para evitar la huelga indefinida convocada por los médicos de familia.

En este punto, Pesquera ha puntualizado que la huelga no es de todos los médicos sino únicamente del Sindicato Médico -el resto de organizaciones sindicales no se han sumado-, que tiene una representación del 10% en la mesa sectorial.

Aún así, Sanidad va a seguir haciendo propuestas «hasta que llegue a un entendimiento» con el sindicato y está dispuesta a incorporar en la negociación «cualquier medida que permita mejorar la situación de acuerdo con lo que marca la ley». «Entendemos que hay espacio para un entendimiento». «Seguiremos hablando y con el ánimo de conciliar», ha dicho el consejero.

Y es que Pesquera reconoce que la Atención Primaria tiene «muchos aspectos susceptibles de mejora», pero ha subrayado que eso pasa «aquí y en toda España» y que en Cantabria la situación «no es la peor de todas las comunidades», en un contexto de falta de profesionales y dificultades que se arrastran desde la pandemia.

El Servicio Cántabro de Salud (SCS) trasladó la semana pasada al Sindicato Médico una propuesta con nueve puntos, el primero de ellos destacando el «compromiso de tolerancia cero con las agresiones a los profesionales en los centros sanitarios», en la que se recoge la citada instalación de cámaras en los centros de salud y en los Servicios de Urgencia de Atención Primaria (SUAP), presupuestada en las cuentas de 2023.

Los portavoces de Cs y Vox, Félix Álvarez y Cristóbal Palacio, han criticado que, teniendo en cuenta que en mayo llegan las elecciones, esto supone «estirar el chicle» y «el que venga detrás que arree». Sin embargo, Pesquera ha señalado que va «al ritmo de la administración», que tiene unos plazos para las licitaciones.

En las propuestas también se alude a la contratación de seguridad privada para los centros de salud con mayor riesgo de agresiones, comenzando por el de los Castros y el Sardinero, en Santander; el de Cotolino, en Castro Urdiales, y el de Covadonga, en Torrelavega. Otra medida que el diputado de Cs ha considerado «ridícula e insuficiente» al afectar solo a cuatro centros.

En un segundo punto de la propuesta se recoge que la Gerencia de Atención Primaria hará fijos a 141 nuevos médicos de familia, 67 a través de la convocatoria del proceso de estabilización de empleo en 2022 y 74 plazas «de nueva creación», que se convocarán «antes del 31 de diciembre de 2022». Se plantean «incentivos» a la movilidad entre zonas básicas de salud.

En el tercer punto, el SCS pone sobre la mesa que los nuevos contratos de continuidad asistencial que se crean en el Plan de Atención Primaria y que estén sujeto a movilidad «disfrutarán de un complemento retributivo vinculado al desplazamiento entre los centros».

Además, por otra parte, se proponen retribuciones para quienes ejerzan labores de coordinación en los centros, así como la adecuación retributiva del complemento de atención continuada para facultativos y profesionales en formación. Y en materia de carrera, se compromete a retribuir el personal facultativo interino «el reconocimiento pendiente en el primer trimestre de 2023».

Se prevé también «reforzar presupuestariamente» el programa especial de optimización del rendicmiento asistencial y de autocobertura en las zonas básicas de salud, así como el programa especial de absorción de la demanda y prolongación de jornada, todo ello para hacer frente al «aumento de la demanda asistencial y la dificultad para encontrar profesionales».

Álvarez (Cs) ha tachado de «lamentable» el documento del SCS y ha considerado que solo recoge «propuestas cosméticas» que suponen «un insulto a nuestros médicos y a los cántabros».

Mientras, Palacio (Vox) ha añadido que a los médicos «no les queda más remedio» que ir a la huelga porque «no aguantan más» ante un Gobierno «desagradecido» que les «da la espalda» y «los maltrata».