Sanidad advierte de un aumento de edad en los contagiados de COVID-19 en los últimos días
En dos semanas se ha triplicado la incidencia, según el Ministerio
La directora adjunta del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), María José Sierra, se ha mostrado preocupada por el incremento en la edad media de los nuevos diagnósticos de COVID-19 en los últimos. Además, ha advertido en varias ocasiones de que en dos semanas se ha triplicado la incidencia acumulada de casos.
Según ha explicado en rueda de prensa este jueves, la edad media de los casos diagnosticados este jueves se sitúa en 45 años. «Aunque es verdad que siguen siendo muy jóvenes los grupos más afectados, estamos comenzado a ver una tendencia hacia edad más avanzada. Esto nos preocupa porque la edad es el factor que más se asocia a la gravedad de la enfermedad. Es uno de los datos que más estamos siguiendo de cerca», ha argumentado.
La experta ha resaltado que, en general, los datos de las últimas semanas presentan una «tendencia ascendente». Sierra ha puntualizado, en cualquier caso, que alrededor de la mitad de los diagnósticos son asintomáticos: «Por eso tenemos muchos más casos diagnosticados que casos que han iniciado síntomas».
En este contexto, ha lamentado que el número de casos sospechosos «ha aumentado ligeramente» en esta última semana, pero ha celebrado que en torno al 80-85 por ciento de ellos se les sigue realizando la PCR. «Lo que no nos gusta esta semana es que el porcentaje de positividad ha pasado del 4 por ciento, con grandes oscilaciones entre CCAA, al 7 por ciento», ha alertado. Asimismo, ha indicado que desde la apertura de fronteras se han detectado 70 casos importados: «Cada semana estamos teniendo más, es una de las preocupaciones que tenemos».
Pese a estos datos, Sierra ha tranquilizado que todavía no se ha detectado un «estrés» en el sistema sanitario. «Sigue habiendo muy pocos casos hospitalizados y en UCI en comparación con los diagnosticados. En sitios donde hay mayor incidencia empiezan a aumentar los ingresados, pero sin suponer un estrés para los servicios hospitalarios, porque la mitad son asintomáticos y la inmensa mayoría son casos leves y en personas jóvenes», ha explicado.