Sanidad activa el plan nacional de actuaciones preventivas por las altas temperaturas de mayo
El Ministerio de Sanidad ha comunicado este jueves que ha activado el Plan Nacional de Actuaciones Preventivas de los Efectos del exceso de Temperaturas sobre la salud tras registrarse en las últimas horas el nivel 1 de riesgo –amarillo– en las provincias de Jaén, Zaragoza, Huesca, Salamanca y León y el nivel 2 –naranja– en Granada.
En un comunicado, Sanidad ha explicado que los efectos asociados a las temperaturas excesivas implican la coordinación de las instituciones de la Administración del Estado y acciones que puedan ser realizadas por las Comunidades Autónomas y la Administración Local.
En este contexto, para el correcto desarrollo del plan, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) proporciona a diario las temperaturas máximas y mínimas esperadas para ese día y las predicciones para los cinco días siguientes.
Esas temperaturas están desagregadas por capital provincial y zonas isotérmicas, en aquellas donde se encuentra implantado, y según el número de días en los que se superan las temperaturas umbrales establecidas en el Plan, se determinan los niveles de riesgo de cada provincia o zona isotérmica.
«La comunicación a las comunidades autónomas permite poner en marcha conjuntamente con ellos las medidas previstas en el nivel correspondiente», ha detallado el departamento que dirige Carolina Darias.
Según ha recordado el Ministerio, el calor excesivo «puede alterar nuestras funciones vitales cuando el organismo es incapaz de compensar las variaciones de temperatura corporal» y provocar problemas de salud como calambres, deshidratación, insolación o golpes de calor, que pueden generar problemas multiorgánicos con síntomas tales como inestabilidad en la marcha, convulsiones e, incluso, el coma.
Además, Sanidad ha apuntado que la exposición a temperaturas excesivas afecta especialmente a los niños, personas mayores, mujeres gestantes y personas con patologías crónicas de base. También cuentan con un factor de riesgo añadido las personas en situación de marginación, aislamiento, dependencia o con discapacidad.
Por ello, para minimizar los daños, desde el Ministerio de Sanidad, se ha insistido en un decálogo de recomendaciones generales, como beber agua y líquidos con frecuencia –aunque no sienta sed y con independencia de la actividad física que realice– y evitar además las bebidas con cafeína, alcohol o muy azucaradas, ya que pueden favorecer la deshidratación. Así, hace hincapié en las comidas ligeras, como ensaladas, frutas, verduras o zumos, «que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor».
También ha recomendado permanecer el mayor tiempo posible en lugares frescos, a la sombra o climatizados, y refrescarse cada vez que se necesite; así como reducir la actividad física y evitar realizar deportes al aire libre en las horas centrales del día.
Sanidad también ha aconsejado el uso de ropa ligera, holgada, que deje transpirar, y consultar al «profesional sanitario ante síntomas que se prolonguen más de una hora y que puedan estar relacionados con las altas temperaturas».