San Vicente de la Barquera cumple con la tradición de embarcar a su patrona en la fiesta de La Folía
Los barquereños han cumplido en la tarde de este domingo con su ancestral rito de devolver a su patrona, la Virgen de la Barquera, a las aguas por las que, según la leyenda, llegó en un lejano «martes de Pascua florido a bordo de una pequeña embarcación sin tripulantes y rodeada de un halo de luz».
Bajo los acordes del himno nacional, tocados por la Banda de Cornetas y Tambores de San Vicente, la imagen de la Virgen fue embarcada en el pesquero Siempre Santa María , momento cumbre de esta fiesta que fue recibido con muestras de alegría por el resto de las embarcaciones del puerto barquereño, haciendo sonar sus sirenas al mismo tiempo que se lanzaron cientos de cohetes al aire.
De esta manera se iniciaba, aproximadamente a las 18 horas, la procesión marítima que este año ha estado condicionada por el fuerte viento del nordeste que superaba los 20 nudos de fuerza, por lo que cumpliendo las normas de seguridad establecidas por la autoridad marítima, tan solo pudo realizarse por el interior de la bahía barquereña, no pudiendo adentrarse en mar abierta.
Pero, antes de la procesión marítima, se desarrolló la procesión terrestre en la que la imagen de la Virgen fue llevada desde la Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles por las empinadas calles del conjunto histórico de San Vicente hasta el atraque del actual puerto deportivo. Las campanas del templo barquereño anunciaban a las 16 horas la salida de la patrona que era llevada por 48 picayos repartido en 4 grupo de 12 para soportar los 300 kilos de peso.
Este año precisamente se rompió la norma no escrita de que la Virgen era portada por los hombres, ya que por primera vez una mujer, la joven Sara Miguel de 29 años de edad, pidió también llevarla, a lo que accedió la Cofradía de la Virgen de la Barquera que se encarga de la custodia y organización de las ceremonias de la patrona de San Vicente.
Acompañada por numerosos fieles entre los que se encontraban las primeras autoridades regionales y locales, encabezados por el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, la vicepresidenta, Eva Días Tezanos, el delegado del Gobierno en Cantabria, Eduardo Echevarría, el consejero de Educación, Cultura y Deporte, Francisco Fernández Mañanes, el alcalde de San Vicente, Dionisio Luguera, parlamentarios nacionales y regionales, alcaldes de la comarca y los principales candidatos a la próximas elecciones autonómicas, realizó el habitual recorrido con el protagonismo musical de la Banda de Cornetas y Tambores que con sus trajes refuerza la imagen marinera de esta centenaria fiesta.
Poco antes del embarque, la procesión realizó su tradicional parada en la avenida de Los Soportales, en donde las picayas ofrecieron los cánticos a la Virgen, acompañados por el sonido de la panderetas y los pasos reverenciales de las antiguas melodías que constituyen también uno de los momentos más especiales de la fiesta a los que las 16 jóvenes elegidas han dedicado numerosas horas de ensayos a lo largo de los últimos meses, ganándose el aplauso de las numerosas personas que aguardan con mucho tiempo para coger alguno de los mejores sitios para escucharlas.
Tras el desembarco de la Virgen en el muelle pesquero, fue llevada nuevamente en procesión terrestre hasta su santuario que se encontraba totalmente abarrotado de fieles. Allí nuevamente actuaron las picayas para finalizar los actos religiosos con el cántico de la emotiva salve marinera. La romería y la verbena pusieron el punto final a la programación festiva que con diversas actividades ha venido celebrándose desde el pasado viernes.