Rusia rechaza las advertencias de Turquía sobre una posible nueva ofensiva militar en el norte de Siria
El Gobierno de Rusia ha rechazado este martes las advertencias de Turquía sobre una posible nueva ofensiva militar contra las fuerzas kurdas en el norte de Siria y ha recalcado que hasta ahora se están cumpliendo los términos del acuerdo que pusieron fin a la anterior operación.
«Rusia ha cumplido plenamente y sigue cumpliendo las disposiciones del memorando de entendimiento entre Rusia y Turquía alcanzado el 22 de octubre en Sochi», ha dicho el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov.
Así, ha advertido de las declaraciones del ministro de Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, sobre una posible ofensiva en la zona «pueden provocar una escalada de tensiones en el norte de Siria».
En este sentido, Konashenkov ha subrayado que las palabras de Cavusoglu «sorprendieron al Ministerio de Defensa de Rusia» y ha recalcado que Moscú garantizó la separación de fuerzas en la zona segura «antes de lo previsto», además de mantener las patrullas conjuntas con Ankara.
«El conjunto de medidas llevado a cabo por Rusia posibilitó estabilizar de manera significante la situación en la región», ha defendido, tal y como ha recogido la agencia rusa de noticias Sputnik.
Las palabras de Konashenkov han llegado un día después de que Cavusoglu asegurara que Estados Unidos y Rusia no están cumpliendo con los acuerdos alcanzados para propiciar un alto el fuego en el norte de Siria y advirtiera de que reanudarán la ofensiva militar contra las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS).
«¿Han cumplido con lo necesario según los acuerdos? No. No lo han hecho hasta ahora, pero deberían», afirmó. «Si no logramos resultados, igual que iniciamos la operación, haremos lo que sea necesario», zanjó.
Turquía puso en marcha el 9 de octubre la ofensiva militar Manantial de Paz para expulsar del noreste de Siria a los milicianos de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), lideradas por los combatientes kurdos sirios de las Unidades de Protección Popular.
El 22 de octubre, tras un acuerdo previo de alto el fuego con Estados Unidos, Turquía acordó con Rusia el despliegue de las fuerzas del Ejército sirio apoyadas por policías militares rusos en el noreste de Siria pero fuera de la zona con presencia militar turca.
Además, Rusia y Turquía acordaron que las fuerzas del régimen sirio y los policías militares rusos facilitarían el repliegue de los milicianos kurdos a una distancia de 30 kilómetros de la frontera y el inicio de patrullas rusas y turcas a diez kilómetros de la frontera tanto en dirección este como oeste del área de la operación militar turca, excluyendo la ciudad de Qamishli.