Robles pide a Lesmes que cumpla la ley y lamenta que no haya utilizado la «vehemencia» de ayer en estos cuatro años
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha pedido al presidente del Tribunal Supremo (TS) y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, que cumpla la ley y ha lamentado que durante estos cuatro años no haya utilizado la «vehemencia» que mostró ayer durante sus palabras en el acto de apertura del año judicial.
Y es que Lesmes solicitó públicamente este miércoles al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que se reúnan «con urgencia» para pactar la renovación del CGPJ en las «próximas semanas», al tiempo que ha amenazado con tomar decisiones que no le gustan si no se devuelven sus plenas capacidades al Consejo.
En una entrevista en Antena 3, que ha recogido Europa Press, la también jurista ha apuntado que Lesmes es consciente de que el Consejo «está siendo rehén por parte del PP» y le gustaría que «la vehemencia de ayer la hubiera utilizado durante estos cuatro años».
La ministra ha enfatizado que «como presidente tienes una obligación de que la ley se cumpla». Así, ha señalado que, al igual que echa en cara al Partido Popular que no esté cumpliendo la Constitución al bloquear la renovación del Poder Judicial, «ahora hay una ley que dice que el día 13 de este mes tienen que estar nombrados los magistrados del TC».
Robles, que dice estar «sobrecogida» por esta situación, ha asegurado que todos los aspirantes al Tribunal Constitucional son personas de un «prestigio inequívoco». «¿Alguien me puede decir que no son capaces los vocales del CGPJ de elegir por acuerdo a personas de una trayectoria impecable desde hace 20 años?», se ha preguntado.
Asimismo, ha aprovechado para cargar contra el PP por hacer «ostentación de que no se va a renovar» el órgano de elección de los jueces. «Me resulta incomprensible», ha apostillado la ministra que ha recalcado que cuando ella fue miembro del CGPJ se renovó en dos meses.
Con todo, Robles ha apuntado que es el «momento de la serenidad, de la reflexión, de mirar al presente y futuro y que se llegue a acuerdos». «Las frases apocalípticas no llegan a nada», ha zanjado.
